Méndez descarta la posibilidad de un acuerdo con Lito
Cándido Méndez, candidato oficial a suceder a Nicolás Redondo, tiene ya elaborada su propuesta de ejecutiva y así se lo ha comunicado a los cabezas de las delegaciones que le apoyan, que en este momento se cifran en el 70%. Con la rotunda frase: "En ella no caben más nombres", ha dejado claro que no va a haber acuerdo con el candidato crítico Manuel Fernández Lito. Sí cabe la posibilidad de que haya algunos cambios pactados en su lista con el sector que le apoya. En el primer día de congreso se produjeron movimientos de algunas federaciones y uniones para intentar introducir a representantes suyos.
La propuesta de la ejecutiva elaborada por Méndez la encabeza él como secretario general y está compuesta por Alberto Pérez (Secretario de Organización), Pedro Díaz Savero (Acción Institucional), José Luis Daza (Acción Sindical), Sebastián Reyna (Administración y Finanzas), Inés Ayala (Acción Social) y Manuel Bonmati (Internacional). Los vocales son cuatro: Jesús Pérez (adjunto al secretario general), Carlos Laporte (adjunto a Organización), Antonio Retamino (adjunto a Administración y Finanzas) y Blanca Uruñuela (Formación). Al cierre de esta edición, esta última todavía no ha aceptado la oferta de Méndez.
Las presiones para que esa lista se modifique afectan a Sebastián Reyna y el argumento es que su nombre está demasiado ligado a. la crisis de la cooperativa PSV. También se cuestiona la permanencia de Inés Ayala.
El debate de la gestión de la ejecutiva saliente, el primero del congreso iniciado con retraso a las siete de la tarde de ayer y que, no había concluido al cierre de esta edición, es el que abre la confrontación entre los dos sectores del sindicato. Las federaciones del metal, construcción, Cataluña, Asturias y Cantabria, que apoyan a Lito, encabezaron las críticas más duras, fundamentalmente contra los responsables actuales de Organización, Antón Saracíbar, y de Finanzas, Sebastián Reyna.
Aznar, Leguina y Gutiérrez
Los líderes de los principales partidos y de los sindicatos mostraron -unos desde el congreso y otros con sus declaraciones- su respaldo al dirigente de UGT, Nicolás Redondo, en el momento de su retirada.
El presidente del Partido Popular, José María Aznar, no intervino ante los delegados, pero en declaraciones a EL PAÍS afirmó: "Mi presencia hoy aquí demuestra mi respeto a Redondo, por graves que sean las dificultades que atraviesa ahora".
Joaquín Leguina, presidente de la Comunidad de Madrid y afiliado a la UGT, se limitó a afirmar que bajo su liderazgo "se marcó la recuperación del sindicalismo". El líder de Comisiones Obreras, Antonio Gutiérrez, dijo desde la tribuna: "Tú sí puedes decir, y todos lo podemos decir, que tu bagaje está rebosante de honestidad y entrega a la causa de los trabajadores".
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