Zedillo, jefe de la campaña de Colosio, nuevo candidato a presidente mexicano
Ernesto Zedillo Ponce de León, economista de 42 años, fue destapado ayer, como sustituto del asesinado Luis Donaldo Colosio, como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI, en el poder) a las elecciones presidenciales de México, previstas para el 21 de agosto próximo.Zedillo, que fue coordinador de la campaña de Colosio, es un hombre de la confianza del presidente Carlos Salinas de Gortari, con cuya política económica de carácter reformista se encuentra profundamente comprometido.
Ernesto Zedillo representa, como Colosio en su día, la continuidad del modelo salinista de modernización de México, casi consumado en lo económico, pero aún incipiente en lo que se refiere a la verdadera transformación política que necesita el país, la gran asignatura pendiente que el malogrado, Colosio levantó como bandera durante su campaña.
Además del autor de los disparos, otros dos individuos han sido detenidos en relación con el asesinato de Colosio, que conmocionó al país.
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El nuevo candidato del PRI es considerado más un tecnócrata que un político a la vieja usanza
Viene de la primera páginaFormado en universidades norteamericanas, como la mayoría de los hombres que han acompañado en su confianza a Salinas en estos últimos cinco años de transformación económica de México, al nuevo candidato del PRI se le considera más un tecnócrata que un político clásico a la vieja usanza priista, como lo han sido, con excepción de Salinas, la mayoría de los presidentes anteriores.
Durante el actual sexenio, Ernesto Zedillo fue primero Secretario (Ministro) de Programación y Presupuesto y luego de Educación Pública, cartera a la que renunció en noviembre para hacerse cargo de la jefatura de la campaña de Colosio. Es miembro del PRI desde 1971 Y con el malogrado candidato al que ahora sustituye le unía no sólo haber trabajado conjuntamente a las órdenes de Salinas, sino ser también amigos personales.
El destape se produjo a las 12.10 horas de la mañana (20. 10 de Madrid) en la sede nacional del PRI en la ciudad de México, en un acto público y televisado en directo a todo el país encabezado por el presidente de este partido, Fernando Ortiz Arana.
Ortiz Arana, que apareció acompañado por el comité nacional del PRI y ante un retrato de Luis Donaldo Colosio, dijo que Zedillo había sido elegido por unanimidad, después de dedicar un emocionado recuerdo hacia la figura del candidato asesinado en Tijuana el pasado día 23. "Ernesto Zedillo es un gran militante de nuestro partido que además está comprometido con el pensamiento de Luis Donaldo Colosio", dijo el presidente priista.
La ceremonia del destape, que es como el PRI viene anunciando desde hace más de 60 años a su candidato presidencial, no varió en absoluto de la forma tradicional, pese a que en esta circunstancia extraordinaria por impedimento constitucional no se ha podido elegir a otros políticos, como hubiera sido el caso de los actuales secretarios de Gobierno o gobernadores de los Estados del país, ya que la ley establece que deben de renunciar a sus puestos seis meses antes de los comicios.
Adversidades
En esta ocasión no hubo ni convención democrática, como algunos- analistas políticos habían sugerido, ni candidatura de consenso entre la vieja guardia y los renovadores del partido. El hecho de que Zedillo sea el candidato significa que, pese a que se trata de una decisión que se toma en secreto y supuestamente se consulta con todas las familias del PRI, ha vuelto a ganar Salinas, el presidente que increíblemente y pese a todas las adversidades que se le han cruzado en lo que va del año, con el levantamiento zapatista de Chiapas, el secuestro de su amigo el banquero Alfredo Harp y el asesinato de Colosio, sigue controlando con fuerza el sistema político mexicano. En una semblanza de Zedillo distribuida por la agencia oficial Notimex se dice que el nuevo candidato del PRI fue, como Secretario de Programación y Presupuesto, un hombre que buscó el diálogo, la negociación y la concertación con todos los gobernadores del país, incluyendo los de la oposición.
Como Secretario de Educación Pública, informaba esta agencia, Ernesto Zedillo sustentó la tesis de "a mayor educación mayor riqueza", y extendió la idea de que la modernización del país no era una moda, sino un requisito indispensable para "equiparar el país con las naciones avanzadas de cara al siglo XXI".
Ernesto Zedillo, nacido en Ciudad de México, pero desde muy niño vinculado por su familia al Estado norteño de Baja California, competirá en estas elecciones presidenciales de México con otros ocho candidatos, entre ellos el dirigente izquierdista Cuauhtemoc Cárdenas, representante del Partido de la Revolución Democrática (PRD) e hijo del general que nacionalizó el petróleo en este país, que vuelve a participar en una contienda electoral después de haber perdido, en medio de acusaciones de fraude, las elecciones en 1988 frente al que. luego fuera presidente, Carlos Salinas de Gortari.
Modernización
Casado y padre de cinco hijos, Zedillo parte como favorito en las elecciones del 21 de agosto, no sólo por la impresionante maquinaria política que representa el PRI, presente a modo de organización en los lugares más recónditos del país, sino porque los trágicos acontecimientos que está viviendo México desde el 1 de enero propician un voto conservador y contrario a cualquier convulsión política. El nuevo candidato del PRI ya advirtió ayer, en su primer acto público, que será un fiel defensor de la continuidad de la política de modernización del presidente Salinas, intentará hacer del PRI un partido "fuerte y unido" y mantendrá como bandera en su campaña electoral el mensaje social y democrático que configurara el pensamiento del malogrado Colosio.
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