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¡Atrévete mujer!"

Dos directivas del equipo de fútbol de Ponferrada organizan un "strip-tease" masculino para paliar las graves deudas del club de Segunda B

"A las mujeres hay que darles alegrías y en época de crisis, más". Con esta rotunda frase Carmen Rodríguez, esposa de un ex futbolista y desde hace tres años directiva de la Ponferradina, justifica que el club berciano organice un strip-tease masculino para recaudar fondos con los que el equipo pueda paliar la crisis económica en la que se encuentra inmerso. Carmen y María Luisa Alonso, las dos únicas mujeres de la dirección del club de Segunda B, pensaron hace tiempo que Ias esposas de los aficionados también tenían que aficionarse" al juego que llevaba a sus maridos a pasar la tarde del domingo fuera de ellas.Ambas han repartido claveles en el campo de Fuentesnuevas y sorteado obsequios diversos como un gancho más para conseguir adeptos. Ninguna iniciativa ha tenido hasta ahora tanto eco como la actual. En esta ocasión, el tradicional desfile de modelos 37 las fiestas light de discoteca han sido sustituidas por una singular convocatoria de strip-tease masculino de los Sexy Boys que a una semana de su celebración, en un local de la capital de El Bierzo, ha desbordado ya las previsiones de las dos aficionadas. ¡Atrévete, mujer!, dice la cuña radiofónica de las emisoras locales. El donativo es de 1.000 pesetas. El reclamo ha tenido una firme respuesta y hasta las dependientas de los almacenes Zara en Ponferrada han preferido reservarse un lugar de privilegio encargando sus entradas con antelación. "No creo que a nadie por ir le cueste un disgusto con el novio el marido", aseguran las dos promotoras del strip-tease masculino. "Cuando hay hambre se agudiza el ingenio y creo que ha sido una gran idea", dice Carmen refiriéndose a la actividad lúdica recaudatoria.

10 millones de deudas

Las deudas del club superan al menos los diez millones, según reconoce la dirección. Desde el pasado mes de enero, el equipo sólo cobra la mitad del sueldo. "Todos queremos que el club salga adelante y los jugadores están echando una mano", afirma Delfrido Pérez, un industrial de la zona, de 50 años, presidente de la Ponferradina desde hace ocho.

En 1986 el club pasó de Tercera a Segunda B. Fue el momento de gloria tras haber brillado en la categoría inferior. El peor momento es sin duda alguna el actual, donde Ia taquilla no llega ni para pagar al árbitro", dice Pérez, y se tiene que hacer frente a una nómina mensual de tres millones de pesetas. En épocas pasadas la taquilla rondaba las 800.000 pesetas. "Cuando un equipo va mal, es normal que la gente no acuda al campo".

Los problemas económicos van parejos con los deportivos. La Ponferradina está a la cola de los equipos de su clase cuando se vislumbra ya el final de Liga. "La afición siempre fue muy buena. Mucha gente da donativos anónimos, pero, claro, uno se viene abajo si se ve que el equipo no prospera", manifiesta con preocupación el presidente del club. Los más del millar de socios de la Ponferradina pagan al año entre 15.000 y 30.000 pesetas de cuota. Los jubilados aportan anualmente su granito de arena: 5.000 pesetas. Carmen y María Luisa han querido con el strip-tease masculino "ir a un lleno seguro".

"No descartamos traer a estos chicos más veces y en locales de mayor aforo", dice con soltura la primera. La Ponferradina tendrá que pagar a estos profesionales del destape 150.000 pesetas por un pase. "Esperamos que merezca la pena", concluyen.

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