El presunto asesino de Vilalba padece una "aberración genética", según los forenses

El presunto asesino de una niña de Vilalba padece una "aberración genética". Psiquiatras y forenses explicaron ayer en la Audiencia de Lugo que José María Real López, de 30 años, tiene una alteración cromosómica que favorece el desarrollo de tendencias psicopáticas y de apetencia sexual por los niños. Sin embargo, Real era "plenamente consciente de sus actos" cuando el 16 de septiembre de 1992 supuestamente violó y mató de 10 hachazos a la niña de nueve años María del Carmen Rivas López.

El reo se presentó a sí mismo ante el tribunal como un guiñapo dominado por las drogas y el alcohol, incapaz de controlar una doble personalidad violenta. "No pienso las cosas cuando las hago. Parece ser que la maté y luego me largué", dijo con frialdad.Real nació con el síndrome de Klinefeter: tiene un cromosoma femenino de más, lo que condiciona toda su personalidad. 0 sea, una "aberración genética", según dos psiquiatras y un médico forense. No existe una relación causa-efecto entre este síndrome y sus tendencias criminales, pero los médicos señalaron que se ha comprobado que este tipo de individuos son proclives a la psicopatía y la paidofilia (inclinación sexual por los niños)

"A mí me llenó de perplejidad porque actuaba como quien ha matado a un conejo", declaró Santiago Lara, uno de los psiquiatras que le atendió tras su detención. Según los médicos, su patología genética y la nube de alcohol y tranquilizantes en la que vivió durante los tres días anteriores al crimen dispararon sus instintos criminales. Los expertos creen que es un enfermo que distingue "entre el bien y el mal".

Real -que en el momento del crimen estaba en libertad condicional tras cumplir condena por, la violación de otra menor- ha tratado de presentarse como un individuo de doble personalidad. "José Mari manda en José y hace de él un pandero", llegó a manifestar a uno de los psiquiatras. Ayer, insistió en la misma tesis. Aseguró que no sabe por qué raptó a la niña y ni siquiera por qué decidió matarla.

El 13 de septiembre de 1992 Real desapareció de la casa de sus padres en Lugo. Robó 220.000 pesetas en un bar, alquiló un coche y durante tres días, en una borrachera continua, vagó por la provincia. El día 16 se levantó con una gran resaca, tomó dos pastillas y pasó por Vilalba. Allí sorprendió a Marúchi Rivas, que volvía de su primer día de colegio."Ella intentó escapar"

Real dice que actuó por un impulso. Introdujo a la niña en el maletero de su coche y se la llevó a un descampado. "Cuando abrí el maletero, ella intentó escapar", relató. "La sujeté y se golpeó contra la puerta del coche ( ... ) No sé si la violé pero recuerdo que lo intenté. Si la penetré fue sólo durante dos minutos o así. Entonces parece ser que la maté y me fui".

El juicio quedó visto para sentencia ayer tarde. Las partes modificaron sus conclusiones y la defensa, que pedía la absolución y el internamiento en un psiquiátrico, aceptó la existencia de asesinato. Solicitó para él 20 años de cárcel. El fiscal se sumó a la acusación particular y además de violacion y asesinato también apreció la comisión de otro delito de rapto. Su petición de condena se eleva a 62 años.