Félix Pons no ve necesario investigar el patrimonio de Roldán para aclararlo todo

La necesidad política de aclarar la actuación de Luis Roldán al frente de la Guardia Civil y su enriquecimiento económico pueden resolverse "sin necesidad de un proceso de investigación inquisitorial" de su patrimonio. Ésta es la opinión que mantuvo repetidamente ayer, durante una rueda de prensa, el presidente del Congreso, Félix Pons, al tiempo que se mostró convencido de que su labor arbitral será "innecesaria" y, en caso de producirse, le resultará tan "extraordinariamente fácil y cómoda" como lo fue en la comisión del caso Renfe.

Pons contestó insistentes preguntas de los informadores sobre la aparente incongruencia entre el texto propuesto por el Grupo Popular -que aprobó el pleno del Congreso el jueves- y el interés ciudadano. El presidente de la Cámara baja no desmintió la repetida afirmación de que el interés público se centra en conocer cómo se ha producido el enriquecimiento de Roldán, mientras la proposición del PP y las palabras de sus portavoces han dejado claro que no entrarán a investigar tal patrimonio *Para Pons, el consenso total conseguido sobre el objeto de la investigación -la gestión de Roldán al frente de la Guardia Civil- "no cierra la posibilidad de líneas de trabajo que permitan dar respuestas sólidas y claras a la preocupación que ha llevado" a crear la comisión.

Tampoco atisba Pons peligro de colisión con las actuaciones judiciales en torno al ex director de la Guardia Civil y sólo admitió que si, en un momento dado, los trabajos del Congreso "perjudican" la investigación de un juez "quien tiene que paralizar sus trabajos es el Parlamento, no el Poder Judicial".

Federico Trillo, responsable del Grupo Popular para asuntos jurídicos, agradeció después la postura de Pons que refleja, dijo, "la natural prudencia con que debe garantizar el funcionamiento de la comisión". Trillo agregó que "no es malo que el presidente se despegue de las actuaciones partidarias", pero aseguró que el PP no permitirá una comisión "descafeinada" y recordó que la actuación de Pons podría ser controlada por la Mesa de la Cámara, lo cual, se apresuró a decir, "no es, en absoluto, una velada amenaza".

La Mesa del Congreso conocerá el próximo martes los nombres de los miembros de la comisión, dos por cada uno de los siete grupos parlamentarios, aunque con voto ponderado, es decir equivalente al número de escanos de cada grupo en el pleno.