La policía detiene en Sevilla, a la principal testigo de cargo contra el duque de Feria

El juicio contra Rafael Medina Fernández de Córdoba, duque de Feria, se iniciará a las diez de la mañana del lunes y las sesiones serán públicas, según ha decidido la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla. La dudas que planeaban sobre la posible suspensión de la vista, debido a la desaparición de Sandra Álvarez Bautista, principal acusadora del aristócrata, han quedado despejadas. Sandra Álvarez, de 18 años, fue localizada y detenida ayer en un refugio de drogadictos de la barriada de Candelaria (Sevilla).

La policía encontró a la joven acompañada de otro individuo, a los que se considera presuntos autores de varios robos por el procedimiento del tirón, por lo que ayer estaban siendo interrogados antes de ser puestos a disposición judicial.Álvarez, adicta a las drogas, que también está procesada en el mismo sumario del duque, se hallaba en libertad provisional y tenía la obligación de presentarse en el juzgado quincenalmente. Lo hizo por última vez el pasado 20 de diciembre y desde entonces se desconocía su paradero, lo que motivó que la audiencia dictase una orden de busca y captura, al pensar que "pudiera tratar de eludir su comparecencia en el juicio oral".

Delito de rapto

La desaparición de la joven hizo peligrar la celebración del juicio, ya que su testimonio constituye la piedra angular de la acusación contra el duque de Feria, a quien la fiscal imputa dos delitos de rapto, otros dos de corrupción de menores y uno de tráfico de drogas.Por si no se encontraba a Sandra, el tribunal ya había estudiado la posibilidad de aplazar el juicio un mes y proceder a declarar en rebeldía a la joven si al cabo de ese tiempo no era descubierta. No obstante, la joven puede no responder a algunas preguntas. Ese derecho le asiste debido a que ella está también encausada y pendiente de una petición fiscal de dos años de prisión por supuesta implicación en el rapto de una niña.

La audiencia decidió ayer que las sesiones fueran públicas, al aceptar los argumentos formulados por el fiscal jefe, Alfredo Flores, que considera que no hay motivos que aconsejen lo contrario, dado que en la vista no va a estar presente ni la niña Ana María, la presuntamente raptada, ni ninguna otra menor de edad.