Aznar juzga inoportunas las demandas autonómicas que "crispan la vida española"

El presidente del Partido Popular (PP), José María Aznar, censuró ayer en Almería las últimas demandas planteadas por la Generalitat catalana para aumentar su techo competencial, ya que, a juicio de líder popular, surgen en un momento inoportuno. Sin mencionar explícitamente a Jordi Pujol, presidente catalán, Aznar dijo: "Me parece una equivocación intentar crispar la vida política con demandas que no son exactamente las más exigibles a cualquier responsable político"

Aznar condicionó el desarrollo autonómico a la firma de un gran pacto de alcance nacional, con representación de las principales fuerzas políticas, que culmine en un acuerdo de distribución de competencias entre las comunidades autónomas, la Administración central y los ayuntamientos. De no suceder así, reiteró, "seguiremos en actitudes que lo único que hacen es tensionar la vida, del país".No obstante, el presidente del PP antepuso la lucha contra la recesión a cualquier otra consideración política, incluida la negociación para ampliar las competencias autonómicas. Aznar echó mano de los últimos datos que siguen incidiendo sobre la crisis, como el aumento del IPC y el déficit público de 1993, para sentenciar que el Gobierno socialista mantiene una política económica "fracasada" y le restó cualquier capacidad para sacar al país de la pésima coyuntura económica que atraviesa.

En su opinión, la ineficacia del Gobierno se extiende a la lucha contra la corrupción, si bien se mostró proclive a alcanzar un acuerdo que tienda a la regeneración de la vida democrática. "Me gustaría llegar este mes a los acuerdos de mejora institucional", afirmó el líder conservador.

Durante su visita, José María Aznar se reunió con un colectivo de armadores que, en las últimas semanas, han protestado ante la falta de ayudas para compensar la parada biológica impuesta por Marruecos.

Tras la entrevista el presidente de los populares se desplazó hasta la localidad de Huércal-Overa para un almuerzo, con unos 600 simpatizantes. Aznar habló allí de las relaciones entre la formación que lidera y el PSOE. Aunque el líder de los populares admitió que respaldaría la gestión del Gobierno "siempre que sea necesario", dejó entrever un cambio en la estrategia del PP ante la proximidad de los comicios europeos y andaluces que, desde su parecer, aventuran un cambio político.