Uno de los policías acusados de la matanza de Nigrán pensaba liquidar también a su cómplice
En Nigrán hubo cuatro asesinatos, pero pudieron ser siete. Se sabía que dos miembros de la familia del industrial David Fernández lograron escapar a la matanza. Ayer se conoció que los planes del policía Manuel Lorenzo incluían acabar con su cómplice, el también policía Jesús Vela. Además, Lorenzo se ofreció en 1993 a Esther Lago, esposa del supuesto narcotraficante Laureano Oubiña, para matar al arrepentido Ricardo Portabales, clave del juicio de la Operación Nécora.Los dos presuntos asesinos llegaron al chalé del industrial en Nigrán, pueblo cercano a Vigo, para sacarle 200 millones de pesetas y no dejar supervivientes. Con ese dinero pensaban pagar deudas de droga, juego y prostitución. La cifra final de su botín fue de 20 millones.
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