Renovación del permiso de conducir
Vista la apremiante llamada de un lector del periódico en el ejemplar del día 23, me apresuro a exponer mi experiencia en la renovación del permiso de conducir.Deduzco en primer lugar que el angustiado lector se beneficia de una ventaja inapreciable, ya que, por su edad, ha disfrutado de 10 años de despreocupación por la materia; no es como yo, que desde hace años tengo que hacer esa revisión anualmente. Pues bien, yo recuerdo haber leído en alguna publicación, no sé si ley de tráfico o folleto informativo, que, en caso de cambio de domicilio, es obligatorio comunicarlo a la jefatura correspondiente. Si este cambio le ha ocurrido una o varias veces en el transcurso de esos 10 años, la consecuencia es obvia: no podrá quejarse de nada.
Así que mi sugerencia es que, por medio de una carta certificada, y con acuse de recibo mejor, comunique ese dato esencial a la oficina correspondiente. Porque es cierto: la renovación del permiso de conducir, hoy por hoy, es cómoda, ya que puede hacerse por correo y evitar hacer la renovación personalmente. O puede ponerse al habla con el gestor administrativo que le plazca.
Otra cuestión es dirigirse telefónicamente a una oficina administrativa de cualquier tipo. Comparto, pues, el tono que emplea por la tortura que supone aguantar (a mí me ha ocurrido, y no sólo una vez) más de diez minutos de reloj el sonsonete musical en la más completa mudez; y es que muchas personas, independientemente de la edad, no sabemos apreciar los adelantos de nuestra burocracia, lo chic y moderna que es, cómplice, sin duda, de los pingües beneficios de nuestra amada Compañía Telefónica.-
