Investigando a los Clinton
La conformidad del presidente Clinton con los llamamientos para una investigación independiente de su papel y el de su mujer en el fracaso de los negocios de Whitewater y Madison en Arkansas era inevitable. Con las demandas de un consejo especial que están surgiendo en el Congreso, y en especial en su propio partido, Clinton tiene una pequeña oportunidad de ceder. El anuncio de la Casa Blanca, el miércoles, de que a la fiscal general, Janet Reno, se le había pedido reunir un consejo especial ( ... ) para examinar el asunto Whitewater, fue un cambio bien recibido. (...) El retraso ha acrecentado las sospechas sobre las razones de los Clinton para resistirse a un examen de sus negocios de Arkansas. Esto se ha sumado al creciente clamor por un investigador independiente y una declaración pública a propósito de todos los detalles que envuelven a Whitewater y Madison.Una investigación rápida, no una de esas que cortan cabezas, pero tampoco que persiguen sombras, sirve a los intereses de todo el mundo. Ha habido ejemplos de exámenes especiales que se alejaban del camino y que comprometieron el ego y la vanidad de los acusadores. Ha habido más ejemplos, de cualquier manera, de los que hicieron el trabajo y lo hicieron bien y eficientemente. ( ... ) El presidente puede hacer su parte estando a la altura de sus acciones y compartiendo la información con los americanos sin esperar el informe del consejo.
14 de enero