Rusia intenta un nuevo récord de estancia en el espacio durante más de 14 meses
Valeri Poliakov inició ayer la gesta astronáutica, a pesar de la penuria económica
El médico y astronauta ruso Valeri Poliakov es el protagonista de la próxima gesta espacial, ya que intentará permanecer en órbita un tiempo récord de 427 días (más de 14 meses). Poliakov forma parte de la tripulación de la nave Soyuz TM 18, que despegó ayer del cosmódromo, de Balkonur (República de Kazajstán) con destino a la estación espacial Mir. Los dos acompañantes de Poliakov permanecerán con él hasta el próximo 4 de julio, en que serán relevados por otros dos astronautas. Rusia mantiene, a pesar de las dificultades económicas, un activo programa espacial.
La nave Soyuz partió, a bordo de un cohete Proton, a las 11.08 (hora peninsular española), dejando atrás un paisaje totalmente nevado y observada por miembros de la comisión espacial rusa y por un representante de la NASA estadounidense. Debe acoplarse mañana a la Mir, donde los tres astronautas se encontrarán con sus compañeros Vasili Chibliev y Alexandr Serebrov, que utilizarán la misma nave para volver a la Tierra el próximo día 14.Poliakov intentará batir el récord de estancia en órbita, que ostenta actualmente Musa Manarov, con 366 días. de estancia durante los años 1987-1988, y llegar hasta los 427 días. El propio Poliakov estuvo ya en el espacio durante 241 días en los años 1988-1989.
Sin embargo, Neli, la esposa de Poliakov, dijo a Efe que ella cuenta que serán dos días más, un total de 429, pues su marido le escribió en una nota que le espere el 13 de mayo de 1995. "Para Valeri es el sueño de su vida profesional", comento Neli Poliakov, en alusión al programa científico que llevará a cabo su marido, quien se someterá a una serie de experimentos médicos.
Cooperación internacional
La Mir, que con sus 16 vueltas al mundo diarias, todavía luce la bandera soviética, fue lanzada al espacio en 1986 como símbolo de los brillantes éxitos científicos de la URSS en el estudio del espacio. Actualmente, a pesar de los graves problemas económicos de Rusia, este país mantiene un ambicioso programa espacial en una amplia colaboración con otros países y con grandes planes de ampliarla a Estados Unidos.A finales de 1993, tras varios meses de dudas, el primer ministro ruso, Víktor Chernomirdin, afirmó que se desbloquearán los fondos para asegurar su continuidad. En 1993 fueron lanzados 50 vehículos espaciales -de ellos, dos tripulados y cuatro de carga para la Mir-, y las previsiones para 1994 son igualmente altas.
Actualmente, el ruso Serguéi Krikaliov, famoso por haber sido el último cosmonauta soviético que vivió en el espacio la desintegración de la URSS -en diciembre de 1991, durante un vuelo de casi un año hace un curso de entrenamiento en Estados Unidos para volar en el transbordador norteamericano. Un acuerdo entre la Comisión Espacial de Rusia y la NASA prevé un vuelo de una semana de un ruso en el transbordador.
La cooperacion intemacional permitirá el próximo lanzamiento del satélite meteorológico Meteor 3, proyecto conjunto de Rusia, Alemania y Francia. Un satélite indio y otro ruso para experimentos biológicos, el Bion, serán lanzados al espacio por cohetes rusos el próximo diciembre.
Antes, en noviembre, con dos años de retraso sobre lo programado, partirá el módulo científico Spectre para acoplarse a la estación Mir.
Americano en la 'Mir'
El alto ritmo de vuelos tripulados y de carga se mantendrá hasta el año 2000. Durante 1995 está prevista la misión más espectacular de muestra de la cooperación con Estados Unidos. Un astronauta estadounidense llegará a la Mir a bordo de una nave rusa y dejará la estación tres meses después a bordo de un transbordador estadounidense, que se acoplará por primera vez con la estación rusa.El proyecto más importante es, sin duda, la participación rusa en el programa de estación espacial internacional liderado por Estados Unidos, con Europa, Japón y Canadá como socios.
