Las carreteras españolas
Como aficionado al esquí, suelo visitar cuando puedo las estaciones de invierno tan bonitas y variadas que existen en España, y durante estas minivacaciones que me permiten escapar de la vida cotidiana estoy impresionado por la excelente infraestructura de carreteras que existe en este país.Los que dicen que las carreteras de España son inadecuadas están equivocados. La infraestructura vial aquí es igual o mejor que en mi país, el Reino Unido.
Solamente tengo una crítica. Durante el último puente de la Inmaculada fui a Baqueira Beret. La autovía entre Madrid y Zaragoza es una maravilla, y la carretera entre Zaragoza y Viella, pasando por Huesca y Barbastro, es de buena calidad. Lo que no es coherente es la colocación de las señales que indican diferentes límites de velocidad, ya que son completamente arbitrarias y no llevan ninguna relación con las condiciones de la carretera. A veces se cambia el límite de velocidad de 120 a 90 kilómetros hora en una curva que no merece un cambio tan drástico; en otra curva semejante no hay ningún límite de velocidad estipulado. A veces se reduce el límite de velocidad hasta 90 kilómetros hora, y en una larga recta a continuación no hay ninguna indicación de que el límite haya terminado. En una parte del trayecto se especifica un límite de 120 kilómetros hora, y en el mismo lugar hay una señal indicando peligro de desprendimiento de tierra. No muy lógico, ¿verdad? Y en otro lugar no había señal limitando la velocidad ni señal de indicación adecuada al aproximarse a una curva peligrosa entre Huesca y Zaragoza.
Afortunadamente; todos los conductores hacen caso omiso de estas señales, pues si las acataran a rajatabla esto daría lugar a un aumento de accidentes.
En mi opinión, el departamento de tráfico deberá examinar detenidamente la colocación de señales de límite de velocidad en las carreteras españolas y realizar los cambios apropiados.-
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