Bossi ataca por "inconstitucional" la ley de financiación de los partidos

La ley italiana de financiación de los partidos políticos "es inconstitucional, ya que sitúa en el mismo plano las donaciones [a los partidos] y los fondos de Tangentópolis [las comisiones ¡legales logradas a cambio de favores políticos]", afirmó ayer Umberto Bossi, líder de la Liga Norte, para explicar su comparecencia en el juicio contra Sergio Cusani, el financiero socialista que hizo de intermediario en una comisión de casi 14.000 millones de pesetas pagada por el grupo Ferruzzi en 1991 a democristianos, socialistas, socialdemócratas, liberales y republicanos.Un dirigente del grupo citado afirmó el pasado martes, mientras declaraba en el mismo proceso, que Bossi pidió personalmente a Carlo Sama, ex consejero delegado de Ferruzzi, una ayuda económica para la Liga que se concretó en los 16 millones de pesetas cuya recepción determinó la detención, el mes pasado, de Alessandro Patelli, secretario administrativo de Bossi.

Por tales hecho fue convocado ayer ante el tribunal el líder lombardo, en calidad de simple testigo, aunque resulte cada vez más comprometido en la única operación financiera ¡legal detectada hasta ahora en su partido. "Creo que el propio Sama confirmó ante la sala que la Liga nunca pidió dinero", explicó Bossi a los periodistas. Lo que la Liga pidió "a todos los empresarios en 1991 " fueron "trabajos para mantenemos", y, en concreto, que se anunciaran con publicidad pagada en el periódico de la Liga Norte.

"Calderilla"

"Sama no aceptó, porque no quería ligar su nombre al de la Liga, y prefirió la vía de la calderilla, de los 200 millones que fueron a manos de Patelli", añadió Bossi. La ley de financiación de los partidos es inconstitucional, prosiguió en ese contexto, porque, para que una donación de ese tipo pueda ser declarada y, por tanto legalizada, es necesario que el que la concede quiera hacerla pública.Esta defensa del líder de la Liga Norte tiene aspectos similares a la que en su día formuló el ex líder socialista Bettino Craxi. Pero Bossi, que ayer anunció que su partido prepara una nueva ley de financiación de la política e incluso se mostró convencido de que el proceso de Cusani será el único surgido de la investigación Manos Limpias que llevará a celebrarse, afirmó ayer que los intentos de implicarle en el problema sólo servirán para que su movimiento gane nuevos votos.

La Liga, como el Partido Democrático de la Izquierda (PDS, ex comunista), ha pedido al presidente del Gobierno, Carlo Azeglio Ciampi, que haga lo necesario para que las elecciones se celebren, como muy tarde el 10 de abril. El resto de partidos de oposición, incluidos Refundación Comunista y La Rete, pidieron ayer a Ciampi, que dimita antes de que se debata la moción de censura del próximo día 12, a fin de dejar claro que los italianos votarán sea cual sea el resultado.