Rabin pretende retrasar la negociación directa con Arafat hasta enero

Un eventual acuerdo entre Israel y los palestinos tendrá que esperar, como mínimo, a que pasen las navidades. La reunión entre el primer ministro israelí, Isaac Rabin, y el presidente de la OLP, Yasir Arafat, destinada a concretar la retirada del Ejército hebreo de Gaza y Jericó podría celebrarse el 6 de enero, el día de Reyes, y no el próximo 23 de diciembre como estaba previsto, según informan fuentes próximas a Rabin. Las autoridades israelíes, que ya no hablan de un retraso de días, han comenzado a hablar de varias semanas.

Las negociaciones secretas entre las delegaciones israelí y palestina atraviesan por un mal momento: No se producen nuevos avances. Sin embargo, el ministro de Exteriores israelí, Simón Peres, y Yasir Arafat, el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), se volverán a ver las caras en Oslo en las próximas 48 horas para tratar de hacer salir el proceso de paz del estancamiento en que se encuentra. Como prueba de desconfianza, el Gobierno de Rabin anunció ayer que, de momento, la OLP seguirá en la lista de "organizaciones terroristas".Rabin no está dispuesto a ceder un milímetro en su principio de mantener absoluto control de los asuntos de seguridad en los cruces fronterizos entre Jericó y Jordania, por un lado, y Gaza y Egipto, por otro. El asunto de las dimensiones geográficas de Jericó, donde se hará el experimento de autonomía en la primera fase del proyecto de paz entre Israel y la OLP firmado en septiembre, es el otro escollo.

Las esperanzas palestinas de ver el inicio de una retirada de ambos territorios este año se desvanecieron ayer con velocidad. Pero según el diario palestino Al Quds, Nabil Shaath, el principal negociador palestino en las conversaciones que se celebran en El Arish, precisó que era "mejor retrasar el repliegue israelí que hacer más concesiones".