Los Doce dan luz verde a la reconversión siderúrgica
Después de 20 meses de negociaciones, los Doce alcanzaron un acuerdo político para dar luz verde a la reconversión de las siderurgias públicas española, alemana, italiana y portuguesa. Esta reconversión supondrá en España la desaparición de 11.800 puestos de trabajo, unas inversiones públicas de más 500.000 millones de pesetas y una reducción neta de la producción de 1,7 millones de toneladas anuales de acero laminado en caliente.España se opuso hasta el último momento a aceptar nuevos adelantos en el calendario de cierre de la factoría de Ansio (Vizcaya), que cesará su actividad a finales de 1995, justo cuando está previsto que empiece a funcionar la nueva miniacería de Sestao.
El acuerdo alcanzado ayer es sólo político. El acuerdo formal se producirá en el próximo Consejo de Ministros de la Unión -probablemente el de Pesca, el lunes próximo, o el de Agricultura, a principios de año-, después de que los Parlamentos del Reino Unido y de Dinamarca den su visto bueno al pacto.
El ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, mostró su satisfacción por el acuerdo, 20 meses después de que España presentara su plan de competividad. Bloqueado en numerosas ocasiones, desde otoño quedó condicionado a que se desbloquearan también los planes de reconversión de la italiana Ilva y de la alemana Ekostahl.
A última hora, desbloqueados estos dos expedientes, la pretensión de ingleses, daneses, luxemburgueses y holandeses de adelantar el cierre de la factoría de Ansio estuvo a punto de volver a retrasar el acuerdo. España dijo estar dispuesta a vetar el resto de los planes siderúrgicos y a bloquear la concesión de ayudas al carbón si los Doce insistían en su postura.'Operación acordeón'
Al final, Ansio deberá cerrar a finales de 1995, 18 meses antes de lo contemplado en el primer plan español, pero seis meses más tarde de lo que pretendían los Doce. El acuerdo da paso a la constitución de una nueva siderúrgica privada a partir del holding de la Corporación Siderúrgica Integral (CSI), formado con los activos de Ensidesa y Altos Hornos de Vizcaya.
La nueva CSI privada se constituirá en los próximos 15 días, según las previsiones de Eguiagaray. El ministro afirmó que la miniacería de Sestao debe estar en funcionamiento pleno dentro del año 1996, lo que significa que debe empezar su actividad a principios de ese año.
Por otra parte, la CSI comunicó ayer a la CNMV que tiene previsto convocar juntas generales extraordinarias de Ensidesa y AHV. En ellas propondrá realizar sendas operaciones acordeón, reduciendo el capital a cero para absorber pérdidas y, posteriormente, ampliar capital.
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