Muchos actores del Festival de Otoño aún no han cobrado

Más de 177.000 espectadores acudieron a las 885 representaciones programadas del Festival de Otoño. Todo un éxito, teniendo en cuenta que, aunque el festival ha gustado, algunos de sus protagonistas, los que han subido a los escenarios, han tenido que vender sus motos, sablear a las amistades o comer la sopa boba, porque muchos aún no han cobrado por sus trabajos.El propio consejero regional de Cultura, Jaime Lissavetzky, se lamentó ayer de las deudas que su consejería, organizadora del festival, mantiene con la mayoría de las compañías que han intervenido en la muestra.

Lissavetzky justifica los retrasos de los pagos en los procedimientos que establece la Ley de Contratos del Estado: "Tendremos que evolucionar hacia otro modelo de gestión en el que no haya obstáculos administrativos", dice el consejero. "Es algo muy engorroso, sobre todo para asuntos culturales, ya que tenemos unos grandes controles para que haya transparencia".

El consejero de Cultura dio a entender que éste podría ser el último año en que se pague con retraso, ya que esperan conseguir un modelo de gestión más fluido.

Balance

Sin embargo, Lissavetzky habló ayer de éxito al hacer balance de la programación del festival, que se clausuró el domingo con la obra Pasionaria, ¡no pasarán! Los responsables de este festival, conscientes de que no tienen otro método de analizar sus resultados que no sea el cuantitativo, se encuentran especialmente satisfechos con la Muestra Alternativa de Teatro.

Las 81 compañías programadas han superado con creces todas las expectativas previstas, a pesar de tratarse de compañías de danza y teatro de pequeño formato, carentes de nombres afamados y programadas en 16 salas ajenas a los circuitos comerciales.

Lissavetzky destacó el esfuerzo por el teatro y la danza: "La ayuda a estas áreas debe ser más significativa, ya que cuentan con circuitos menos elaborados que los de música", considera.

La recaudación por taquilla ha sido de 191 millones de pesetas, y 156 millones han llegado a través de patrocinadores. Todas estas cifras, así como las de espectadores, representaciones y montajes, han sido las más positivas hasta ahora en la historia del Festival de Otoño.

La Comunidad ha aportado 108 millones, frente a los 53 aportados el pasado año para el festival, ya que en 1992 se contó con presupuestos aportados por el Consorcio Madrid Capital Cultural y del V Centenario.