11 presos mueren asfixiados durante un motín en una cárcel argentina

Por lo menos 11 presos preventivos murieron asfixiados durante un motín en una cárcel de la provincia argentina de Catamarca, situada en el noroeste del país, a unos 1.000 kilómetros de Buenos Aires.Las versiones de lo ocurrido en la prisión de Catamarca, ubicada en el centro de la capital de la provincia, a escasa distancia del palacio de gobierno y la catedral, no coinciden. Un comunicado del Gobierno provincial informa que el incendio fue provocado por los mismos presos, que quemaron varias colchonetas. El Gobierno niega que se empleasen gases lacrimógenos para sofocar el motín.

Los familiares, que gritaban de forma desgarradora a las puertas de la cárcel, acusan a los carceleros de haber mantenido cerradas las puertas y dejar morir a los presos encerrados en los baños, que se convirtieron en una auténtica cámara de gas.

"No fue un accidente"

El diputado provincial, el peronista Víctor Hugo Iriarte, denunció que lo ocurrido "no fue un accidente, sino una verdadera masacre, un asesinato. Los encerraron a la hora de la comida y con 43 grados de temperatura. Así comenzaron los incidentes". Los presos iniciaron el motín, al parecer, para protestar por los malos tratos y la lentitud en la tramitación de sus causas.

En la mañana del martes, día del motín, el ministro de Gobierno y Justicia de Catamarca, Guillermo Herrera, había visitado la cárcel, pero no se entrevistó con los reclusos que deseaban plantearle sus reivindicaciones. Herrera daclaró que no tuvo conocimiento de que quisiesen entrevistarse con él. "Mientras estuve en la cárcel no noté nada anormal", dijo. Horas después los presos incendiaban los colchones y se desencadenaba la tragedia.