Renfe califica de "ilegal" la huelga de maquinistas y fija míninos en cercanías
La dirección de Renfe considera "ilegal" la convocatoria de huelga para los días 22 y 25 de este mes realizada por el sindicato SEMAF, mayoritario entre sus 7.500 trabajadores de conducción. Frente a la postura del sindicato de maquinistas, que esgrime como razones para la huelga el incumplimiento del convenio, la compañía asegura que el SEMAF pretende elevar el sistema de primas del colectivo, lo que supondría para la empresa un desembolso adicional de entre 1.000 y 2.600 millones al año.
Tras el enfrentamiento, que puede poner fin a más de dos años sin paros significativos en Renfe, se esconde una guerra abierta por el control efectivo de la compañía entre la dirección de los ferrocarriles y los representantes de quienes los conducen.El conflicto tiene en esta ocasión características diferentes a otros anteriores, ya que el sindicato de maquinistas no cuenta con el apoyo de las otras dos grandes organizaciones, CC OO y UGT y la situación económica resta simpatías a las huelgas -más si las convoca el colectivo mejor pagado, con 315.000 pesetas brutas al mes de media según la empresa y una cifra menor según el SEMAF-.
La nueva estrategia de Renfe respecto al conflicto ha influido en que, por ejemplo, se hayan pactado unos servicios mínimos para los días 22 y 25 que sólo garantizan la circulación a determinadas horas en las cercanías de las grandes ciudades. Renfe no suspenderá ningún otro servicio, ni de regionales ni de largo recorrido, si bien, advertirá a los usuarios que los servicios pueden verse alterados o suprimidos y no venderá billetes de forma anticipada. Con ello, teóricamente, consigue que los clientes se pan exactamente quién es el responsable directo de los paros y, al mismo tiempo, ahorra los salarios de quienes no atiendan los trenes programa dos -un efecto que se diluye cuando se pactan servicios mínimos ampliosLos motivosSegún explicó ayer en conferencia de prensa el director de recursos humanos de Renfe, Blas Alascio, en Madrid circularán entre un 75% y un 50% de los trenes de cercanías de seis a nueve de la mañana; de dos a cuatro de la tarde y entre las 18,30 y las 21,30 horas de la noche. En Barcelona funcionarán entre un 30% y un 50% de los trenes entre las seis y las nueve de la mañana y entre las 18.00 y las 21.00 horas de la noche. En las áreas de Bilbao y de San Sebastián, los servicios se reducirán también a porcentajes de entre el 50% y el 75%, mientras que en -Valencia, circularán entre el 50% y el 30% de los trenes entre las 6,30 y las 9,30 horas de la mañana.
El director de recursos humanos de Renfe, Blas Alascio, lanzó duras manifestaciones hacia el sindicato de maquinistas, a quien acusó de convocar la huelga para mantener una afiliación cuyo único motivo es el económico. Según explicó, el SEMAF está aprovechando temas menores, referidos a la normativa laboral y a la negociación sobre la implantación del conductor único en los trenes, para conseguir subidas por encima de lo pactado. Por su parte, el SEMAF alega como motivos para la huelga, entre otros, incumplimientos de la empresa en suplencias, retribución por antigüedad, además de abusos de autoridad en sanciones e incumplimiento del plan de empresa.
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