Manual de viaje

Esta vez no habrá avionetas privadas. Tampoco hoteles apartados del mundanal ruido. Menos aún extensa comitiva de directivos y aficionados. El viaje de la expedición madridista a Tenerife no difiere en casi nada de otros. Lo único que que los jugadores han pedido al club es "viajar todos juntos".El adelanto del partido al sábado estuvo a punto de causar el caos en las oficinas del club. Las reservas de aviones estaban hechas con más de un mes de antelación pensando que el encuentro se jugaría en domingo. Cuando se tuvo que cambiar el vuelo, las plazas estaban cubiertas. Por eso el Madrid llegó ayer a Tenerife horas antes de lo previsto y por eso tuvo que entrenarse en el estadio Heliodoro Rodríguez.

El regreso también ofreció problemas. La plantilla, debido de la falta de plazas, no podía regresar hasta mañana a las ocho de la tarde o, por el contrario, hacerlo de forma escalonada en diferentes aviones La idea de contratar avionetas privadas se descartó de forma unánime en vista de la experiencia anterior. La contratación de un vuelo charter era inviable al no haber seguidores dispuestos a viajar a Tenerife. Los jugadores pidieron al club regresar juntos y el Madrid no tuvo más remedio que negociar con la compañía Iberia. La solución para recoger al grupo madridista llegó mediante el desvío hasta Tenerife de un avión que iba a Las Palmas.

La elección del hotel fue clara. Nadie quería regresar al Puerto de la Cruz. Allí se hospedó el Madrid en las dos últimas ocasiones. Por mayoría se optó volver a Santa Cruz de Tenerife y al hotel de toda la vida.

Ramón Mendoza, el presidente, no estará en el Heliodor Rodríguez. Tampoco el nuevo director general, Inocencio Arias, quien sí estuvo como aficionado el pasado junio. La representación oficial se limita a tres directivos que habitualmente se desplazan con el equipo.

La plantilla del Tenerife afronta el partido en medio de un ambiente relajado. "El encuentro no tiene el morbo de otras ocasiones y eso se nota en la ciudad" declaró ayer Felipe, uno de sus jugadores más destacados.

Chucho Dorta, el brujo que, vestido de hombre de las cavernas, ejerce de talismán del equipo insular, tampoco tiene confirmada su presencia. Su trabajo se Limita a las grandes ocasiones.