Mendigos y animales

Hasta hoy creía que la misión de un periodista era la de informar, y por informar entiendo relatar un hecho tal cual es, sin poner ni quitar nada. Sé que esto a veces puede ser difícil, pero para eso está la profesionalidad de cada uno.La información dada por su sección el lunes 4 de octubre sobre la manifestación en contra de la tortura de animales es un claro ejemplo de lo que no debe hacer nunca un periodista: manipular una información.

Utilizar a un pobre vagabundo para acusar a los manifestantes de ser crueles es tan incoherente como haber acusado de crueldad a los integrantes de una manifestación proderechos humanos por no exigir justicia para un perro abandonado que se cruzara en su camino.

No creo que nadie anteponga la solución al problema de la violencia con los animales a la de los problemas de los seres humanos. Pero eso no conlleva que no se denuncie la violencia del hombre para con sus hermanos pequeños.-