El PP asegura un año más que los impuestos no van a subir por encima del coste de la vida
Si a los impuestos municipales de Madrid hubiera que adjudicarles una segunda nacionalidad, ésta sería la gallega, por aquello de que nunca se sabe bien si suben o bajan. El concejal de Hacienda, Fernando López-Amor, asegura que en 1994 los madrileños pagarán menos dinero en impuestos que ahora (un 3,06%). Mientras, la oposición -que hoy dará plantón al edil- mantiene que los tributos locales superarán el alza del coste de la vida, que el Gobierno central calcula en un 3,5% el año que viene. López-Amor desdeña esa previsión oficial: la suya no baja del 5%.
"Si todos los años se supera la previsión del índice de Precios al Consumo (IPC), no hay motivo para pensar que este año el Gobierno va a acertar", razona el edil del área económica. Y sostiene que el año próximo los impuestos y tasas municipales bajarán, en general, respecto a 1993.Por ello, los ingresos fiscales del erario municipal sufrirán un recorte de unos 2.300 millones de pesetas. ¿Cómo se va a suplir ese déficit? "Apretándose el cinturón", responde López-Amor, que evita señalar las cínturas sobre las que más se va a ceñir la crisis.
La principal fuente de financiación del Ayuntamiento por la vía de los tributos que gestiona directamente, el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), sube según la oposición -en eso coinciden el PSOE e IU- un 9,12%. Esa cifra resulta de sumar el alza que propone el Ayuntamiento (un 5,4% en el tipo impositivo) y la actualización de los valores catastrales que aplicará la Administración central (el 3,5% previsto en el IPC).
Tasa nueva, tasa vieja
López-Amor responde a la oposicion, una vez más, que el incremento del valor catastral no es responsabilidad municipal y asegura, además, que el Gobierno no va a aumentar el valor de los pisos porque el mercado tiende a bajarlo.
El PSOE sostiene lo contrario. El concejal socialista Alfredo Tejero explicó ayer que, en una reunión celebrada el martes con el secretario de Estado de Hacienda, Enrique Martínez Robles, se informó a las administraciones locales de que los valores catastrales subirán lo mismo que el IPC.
También niega el concejal se de Hacienda que se introduzca una nueva tasa -por licencia de funcionamiento- tal y como denuncia la oposición. "Esa tasa ya existía, pero no se cobraba", explica.
La oposición no ceja en su empeño de demostrar que el Ayuntamiento cada vez recauda más. Como ejemplo del alza de los impuestos municipales, el PSOE señala que un comerciante que abonaba 320.000 pesetas en 1992 por la apertura de un negocio -en un local de 75 metros cuadrados donde sea necesario realizar obras por valor de seis millones- pagará 580.000 pesetas en 1994. El año pasado sólo tenía que liquidar por dos conceptos, según el PSOE, mientras ahora carga con cuatro impuestos.
Las tasas que los madrileños pagan por darse un chapuzón, o una ducha o recibir clases de cerámica en los centros municipales aumentan entre un 6% y un 40%. López-Amor no lo niega (aunque corrige el dato con la inflación que él considera más real, el 5%). "Esos precios no afectan a todos, sólo a los que usan esos servicios", dice el concejal.
La oposición considera una descortesía que se les entregue la documentación de las ordenanzas fiscales sólo una semana antes del pleno en el que serán debatidas. De momento, el PSOE e IU no irán a la comisión de Hacienda de hoy.
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