Inversión frustrada por el secuestro de Iglesias

El diputado general de Álava, Alberto Ansola culpó ayer a ETA por la retirada de una inversión industrial de 60,000 millones de pesetas destitada a montar una fábrica de Transpapel en la localidad alavesa de Lantarón. "El secuestro de Julio Iglesias es en buena parte el, culpable del aplazamiento de las conversaciones de los responsables de la empresa con el Gobierno vasco para la instalación de la planta", declaró Ansola.La empresa, de capital austriaco, iba a crear unos 350 puestos de trabajo directos con una inversión de 60.000 millones de pesetas. El portavoz del Gorbierno vasco, Joseba Arregi, manifestó que esto viene a demostrar que "ETA y su terrorismo no son inocentes en la situación de crisis que vive el País Vasco".

Para el portavoz del Gobierno de coalición, los esfuerzos del Ejecutivo por conseguir nuevas empresas para el país se están convirtiendo en baldíos gracias a ETA. Además -preguntó al sindicato abertzale LAB si también consideran "calderilla" la operación industrial-frustradaen Álava. Este sindicato calificó de "calderilla en términos -económicos" el importe que obtiene la banda terrorista ETA a través del chantaje a los -industriales.

La empresa austriaca Transpapel venía manteniendo contactos con el Gobierno. vasco para la instalación de la planta en la localidad alavesa de Lantarón. El comunicado de la empresa para aplazar las negociaciones cita que "éste no es el momento más oportuno para continuar con ellas".

Ansola aseguró que el secuestro de Julio Iglesias Zamora y el chantaje a los empresarios se va a pagar no sólo in derechos democráticos, sino también "en materia de desarrollo económico, de imagen internacional y de actividad industrial". "Esa es la otra factura que vamos a pagar", recalcó.