¡Esa puerta!
Algo les pasa a las puertas de los lo cales donde se reúne Alfonso Guerra con sus compañeros de partido para explicarles que entre él y Felipe González todo sigue igual y no. se cumple aquella situación poética tan sabiamente formulada por Gil de Biedma: "Nada hay tan triste como una habitación para dos / cuando ya no nos queremos demasiado...". Me intranquiliza que un partido tan fundamental para la vertebración de la política democrática y del Estado español en su mismidad (tan importante como la Liga de fútbol o la Guardia Civil) no pueda ser responsable de las puertas de sus locales, y cuando decide cerrarlas para que no trascienda a desafectos o antagonistas lo que a puerta cerrada se ha hablado, a la madrugada siguiente se esté escuchando las grabaciones de la reunión hasta en la Organización Nacional de Sordos, si la hubiese.El otro día, mis oídos se indignaron ante la chulesca operación de acoso y derribo silogístico que Alfonso Guerra dedicó a un periodista público, no de la derecha empresarial, es decir, a un periodista de Radio Nacional. Todo porque le preguntaba sobre lo tratado en una de esas reuniones a puerta cerrada, por la que se habían filtrado los estornudos e incluso los suspiros. La suspicacia, alimentada por tres décadas de evidencia de que González y Guerra habían fraguado una comedia de antagonismos de fácil montaje porque sólo requiere dos actores, se alimenta ahora del misterio de esas puertas mal cerradas. ¿Tan dificil sería que un compañero tuviera encargada la tarea de gritar "¡esa puerta!" en el momento de iniciarse la reunión? Si dificil es tan escaso esfuerzo en tiempos de relajamiento de toda clase de esfínteres, que Alfonso Guerra controle los suyos y no aplique silogismos de prepotente atleta lógico al mensajero de secretos tan desganadamente guardados como afanosamente filtrados.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Muere a los 78 años el actor Celso Bugallo, premio Goya por ‘Mar adentro’
Koke, batuta y cañón en la rotunda victoria del Atlético en Girona
Estados Unidos intercepta un nuevo petrolero frente a las costas de Venezuela
Las entidades de Badalona se arremangan y habilitan dos espacios para acoger a migrantes del B9
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Manuel Bustos acepta seis meses de cárcel por cargar gastos privados a la Federación de Municipios
- Los jueces del Tribunal Penal Internacional se rebelan ante las sanciones de Trump: “No hay que ceder”
- Tráfico alerta de fuertes nevadas a partir de mañana en plena Operación Navidad
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”




























































