_
_
_
_

Falta de calidad en la corrida goyesca de Ronda

Antonio Lorca

Lo que se ofrece al público en la corrida goyesca de Ronda es un espectáculo bochornoso, un bajonazo en los costillares de la fiesta, y un puro engaño. Hasta ahora, se sabía que los toros se afeitaban. En Ronda, sólo faltó que sacaran a hombros al barbero. Además, a los toros de Jandilla les pasaba algo raro. Salían de chiqueros con violencia y en veloz carrera hacia los burladeros. Daban dos vueltas y se desplomaban en la arena.

El público, poco exigente, protestó poco, y los toreros, responsables también de la burla, se justificaron. Curro Romero hasta le echó valor a su primero, y José Mari Manzanares consiguió algún muletazo de calidad en su lote. Espartaco, muy mermado de facultades tras su reciente cogida en Santoña, nada pudo hacer ante su muerto primero, y exprimió hasta la saciedad la noble embestida del sexto, el menos inválido de la corrida. En una faena larga y emotiva trató de salvar una tarde que no tenía salvación posible.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Antonio Lorca
Es colaborador taurino de EL PAÍS desde 1992. Nació en Sevilla y estudió Ciencias de la Información en Madrid. Ha trabajado en 'El Correo de Andalucía' y en la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). Ha publicado dos libros sobre los diestros Pepe Luis Vargas y Pepe Luis Vázquez.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_