La precampaña gallega arranca con duros ataques entre PP y PSOE

La disolución del Parlamento gallego, que anunciará hoy el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, supone el inicio de una precampaña electoral que ha estado precedida en los últimos días de un intercambio de duras descalificaciones entre dirigentes de las principales fuerzas políticas. El PSOE ha lanzado una ofensiva contra la Xunta, a la que acusa de irregularidades relacionadas con las cuentas del Xacobeo y el desvío presupuestario de 6.660 millones de pesetas. Uno de los más incisivos portavoces de los socialistas gallegos, el diputado autonómico Manuel Cortizo, ha llegado a referirse al PP como "esa calaña que nos gobierna".

Según el acuerdo que adoptará el Consejo de Gobierno de la Xunta, el plazo para la presentación de candidaturas será del 8 al 13 de septiembre. El día 20, las juntas electorales proclamarán oficialmente las listas, y el 1 de octubre se iniciará la campaña, que durará dos semanas. La votación se realizará el 17 de octubre.El PP aspira a mantener e incluso a ampliar la ajustada mayoría absoluta que posee en él Parlamento autónomo, 38 de los 75 diputados. Los populares se enfrentan a una situación en la que apenas existe distancia entre el éxito y el fracaso.

La pérdida de un solo diputado podría costarle el Gobierno a Fraga, ya que los otros tres partidos con posibilidades de obtener escaños -PSOE, Bloque Nacionalista Galego (BNG) y la coalición Esquerda Unida-Unidade Galega- han anunciado que su prioridad es impedir que los conservadores continúen en la Xunta.

En lo que supone un verdadero giro histórico para esta fuerza política, el BNG, que aglutina al espectro más radical del nacionalismo gallego, ha proclamado su disposición a colaborar en el Ejecutivo con los socialistas. Esta alianza ya ha sido ensayada en los dos últimos años en varios ayuntamientos, entre ellos el de Vigo, el más poblado de Galicia.

El vicesecretario general del PP, Mariano Rajoy, ya adelantó esta semana lo que puede ser el discurso electoral de los populares, al advertir sobre la posibilidad de que los socialistas se coliguen con una fuerza política que defiende "la autodeterminación, la independencia y la salida de la Unión Europea".

En cualquier caso, el PP va a centrar su precampaña en explicar las realizaciones de la Xunta. Fraga tiene prevista una larguísima agenda de inauguraciones, y la Administración autónoma prepara una campaña institucional que ha merecido la enérgica protesta del PSOE, porque su lema será Galicia, cuatro años de gestión.

Tono mesurado

Aunque el candidato socialista, Antolín Sánchez Presedo, se esfuerza por mantener un tono mesurado, otros dirigentes de su partido han lanzado en los últimos días durísimos ataques a la Xunta.El PSOE pone en duda la claridad de la gestión del Xacobeo y ha denunciado que el Gobierno autónomo suprimió partidas presupuestarias de inversiones, por valor de más de 6.660 millones de pesetas, para dedicarlas a "gastos electoralistas". Según la Xunta, se trata tan sólo de una modificación de las previsiones iniciales de gasto para hacer frente a necesidades prioritarias.

Los populares atribuyen estos ataques a un intento desesperado de los socialistas de evitar la caída de votos en favor del BNG que le auguran algunas encuestas. "El PSOE ha tenido casi cuatro años para hacer oposición, pero se ha acordado cuando faltan dos meses para las elecciones", señaló el portavoz de la Xunta, Víctor Vázquez Portomeñe, en respuesta a las descalificaciones socialistas.

Los socialistas gallegos han pedido ayuda a los miembros del Gobierno y a distintas federaciones del PSOE para que les ayuden "a rescatar Galicia de un Gobierno autoritario, ineficaz y desfasado". La campana socialista apelará al voto útil, por lo que solicitará el apoyo de todos los "progresistas".

El secretario general del PSOE, Felipe González, se ha comprometido con el candidato de los socialistas a la presidencia de la Xunta a participar en la campaña.

Además de sentimientos de solidaridad, hay otros elementos más pragmáticos que obligarán al PSOE a volcarse en la campana gallega. Las previsiones del Partido Popular son las de obtener la victoria en esa comunidad y hacer de ella una interpretación de avance electoral imparable hacia el Gobierno de la nación.

Aunque el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, no se dejará encasillar, los líderes del PP que en legión acudirán a Galicia, empezando por el presidente José María Aznar, retomarán el discurso de la reciente campaña en las elecciones generales al que sumarán los nuevos males que aquejen a España.

En octubre se estará en plena discusión de los Presupuestos Generales del Estado y en una intensa ofensiva de los populares propia de comienzos de legislatura.

Los socialistas, aunque intentarán obviar el discurso nacional, reconocen en privado que las elecciones del 17 de octubre en Galicia se interpretarán como "el primer test" de su gestión en España, en un terreno que no les resulta nada propicio como es Galicia. A partir de esa fecha todo serán pruebas para los socialistas. Ocho meses después, elecciones europeas y andaluzas.