Atajo mortal
Hace unos, días murió atropellado en mi barrio un niño de 10 años. Podía haber sido mi hijo. 0 el de cualquier vecino. Porque lo terribles que no es la primera muerte ni será, desgraciadamente, la última.El atropello se produjo en la calle de Añastro, un bulevar alrededor del que se articula la colonia El Bosque, una zona de hotelitos y unos pocos bloques que constituye un espacio privilegiado, un verdadero oasis en la zona norte de Madrid. Porque mi barrio es un poco como un pueblo. Los vecinos nos conocemos, nuestras calles son apacibles y arboladas y los niños pueden -o mejor debería decir podían- jugar tranquilamente en ellas.
Lamentablemente, la calle de Añastro se ha convertido en un atajo para cruzar desde la M-30 y Arturo Soria a la avenida de SanLuis y la Vía Borde de Hortaleza. En su momento hubo que quitar de las calles las tachuelas que aminoraban la velocidad por ser ilegales. La señalización de limitación de velocidad y los ceda el paso brillan por su ausencia. Y, claro, los coches van deprisa, sin respetar una zona residencial y de paseo.Por eso le escribo. Porque, como bien debe saber el alcalde, los vecinos de la colonia El Bosque estamos bastante cansados de hacer escritos y presentar instancias sin que nadie nos haga caso. Porque, por si nos faltaba algo, pende desde hace años sobre nuestro barrio la amenaza de la conversión del bulevar de Añastro en una vía rápida, lo que supondría la separación irremediable del barrio en dos zonas, la degradación total de la colonia y, sobre todo, el peligro permanente para los vecinos. Nuestro problema es que somos gente bien educada y no entra en nuestros esquemas salir a la calle a pegar gritos y montar broncas. Por otro lado, tampoco tenemos influencias que impidan la apertura de una vía rápida que destrozaría la colonia. Así que en eso estamos. ¿Podrá echarnos una mano el señor alcalde?-
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