La esperanza de que el Bundesbank rebaje hoy sus tipos de interés frena el descalabro de la peseta

La peseta volvió a sufrir ayer los ataques de los especuladores y pasó verdaderos apuros durante la primera hora de sesión. La rebaja de 20 centésimas en el tipo de interés de los repos en Alemania y las esperanzas de que el Bundesbank reduzca hoy el precio oficial del dinero frenaron el descalabro de la moneda española. Algunos operadores piensan que el Banco de España tuvo que intervenir a primera hora de la mañana, cuando la peseta cayó hasta 82,40 frente al marco y a 141,8 respecto al dólar -al cierre se fijaron cambios a 81,35 y 139,15-, aunque la autoridad monetaria lo negara. Políticos y analistas urgieron al Gobierno para que defina su política economía para estabilizar los mercados.

Al final todo quedó en un susto. En menos de una hora, la peseta se había depreciado en más de un 2% frente al marco y el dólar y los operadores se temían lo peor. Cuando el marco se situó en las 82,40 pesetas, en el mercado se empezó a pensar en la cota de 84,01 que fija el límite de fluctuación de la peseta frente al marco. El ataque de los especuladores, iniciado a las 17,00 horas del martes, continuaba con más violencia al inicio de la sesión de ayer. Pero, de repente, la presión acabó igual que había empezado y la jornada transcurrió con una calma relativa.Al cierre, los responsables del Banco de España -que negaban haber intervenido en defensa de la peseta, a pesar de los síntomas claros detectados en el mercado- respiraron aliviados. La peseta sólo había perdido 45 céntimos frente al marco e incluso había conseguido ganar posiciones respecto al dólar. Aun así la moneda española seguía siendo la más débil del SME, con un 3,03% de depreciación sobre la más fuerte, el florín holandés. Sólo quedaba esperar a la decisión de esta mañana del Bundesbank sobre tipos de interés.

Una, fuente oficial consultada por este periódico mostraba su convencimiento de que el banco central alemán rebaje hoy los tipos de descuento y lombardo -ahora están en el 6,75% y el 8,25% respectivamente-, después del gesto de ayer de reducir el de los préstamos con pacto de recompra (repos) en 0,20 puntos. "Si se confirma esa bajada", explicaba, "la peseta y las otras cuatro monedas europeas sometidas a presión [franco francés, corona danesa, franco belga y escudo portugués], tendrán una tregua y el SME se habrá salvado".

A la espera de la confirmación oficial, el Banco de España y el Tesoro mantuvieron ayer sus tipos de interés en la intervención diaria en el mercado interbancario (11,05%) y en la subasta de letras a un año(10,08%), en la que apenas se colocaron 72.000 millones de pesetas. La Bolsa de Madrid y el mercado secundario de deuda registraron alzas.Mientras tanto, analistas nacionales y extranjeros coincidían ayer al afirmar que la posible rebaja de tipos de Alemania no era la solución definitiva para el SME. Diversos operadores del mercado de Londres, citados por Reuter, empezaban a hablar de un inevitable reajuste de paridades en el SME, sobre la base de una revaluación del marco del orden del 5% respecto a la mayoría de las divisas europeas.En España, analistas y políticos urgían la definición de la nueva política económica del Gobierno para defender la moneda. Cristobal Montoro, portavoz económico del Grupo Parlamentario Popular, afirmó en conferencia de prensa que es -revisible una nueva devaluación de la peseta en agosto "si no se toman medidas para corregir los actuales desequilibrios económicos". Montoro defendió la permanencia en el SME, aunque añadió que "la estabilidad hay que merecerla'

Seguir en el SME

El vicepresidente del Grupo Parlamentario de IU-IC, Rafael Ribó consideró necesaria una rectificación en la política económica del Gobierno para mantener la peseta en el SME. Otros expertos económicos consultados consideraron "muy urgente" la definición de la política presupuestaria que seguirá el nuevo Gobierno, "que despeje las incógnitas que facilitan la especulación".

El presidente de Mercados de Futuros Financieros, José Manuel Basáñez, afirmaba en Santander que el Gobierno no debe permanecer impasible ante el acoso al que está siendo sometida la peseta, informa Santiago Hernández. Basáñez afirmó que "hay que estudiar todas las posibilidades, incluso la de una salida del SME".