ETA hace estallar un explosivo en un hotel de La Manga

Un artefacto de poca potencia hizo explosión a las cinco de la mañana de ayer en un hotel de la zona turística de La Manga del Mar Menor, en Murcia. Un hombre, que dijo hablar en nombre de ETA, avisó de la colocación del artefacto media hora antes de la explosión. El aviso lo hizo en sendas llamadas telefónicas a la agencia Efe y a la Cruz Roja de San Sebastián (Guipúzcoa). Sólo se registraron daños materiales en el lavabo de caballeros de la piscina exterior.

La Guardia Civil desalojó en unos minutos a los 800 huéspedes del hotel Cavanna, que estaba al completo. Uno de los veraneantes, vecino de Madrid, relató ayer que él y su mujer vistieron con "lo justo" a sus dos hijos y huyeron de la habitación. "Nos asustamos por los golpes que los guardias civiles daban en las puertas y la verdad... tuve miedo de que pasara algo... Después, el desalojo salió bien". La tranquilidad del desalojo fue destacada por la delegada del Gobierno en Murcia, Concepción Sáenz, que en las puertas del hotel pidió a los huéspedes "serenidad".Los huéspedes no oyeron la detonación del artefacto, debido a su poca potencia. La Guardia Civil, con perros especializados, revisó todas las dependencias del hotel para cerciorarse de que no había más artefactos. Dos horas después se recuperó la normalidad.

El artefacto, aproximadamente de un kilo de amonal, fue colocado en un falso techo de escayola en los lavabos de caballeros de la piscina. El explosivo estaba en dos tetrabrik de una marca francesa de leche. Sólo hizo explosión uno de ellos, ya que la humedad inutilizó el segundo paquete, que previsiblemente fue colocado hace varios días.

La delegada del Gobierno dijo que todo apunta ¡a que el atentado ha sido obra del mismo comando de ETA que ha colocado esta semana otros nueve artefactos en Alicante. La Guardia Civil estaba ayer tras la pista de un coche con matrícula de Alicante, en el que viajan tres sospechosos, dos hombres y una mujer.

La CEOE condenó ayer los atentados registrados durante esta semana en diversos establecimientos de la costa mediterránea y urgió a las autoridades a adoptar medidas contra este tipo de actos "tan abyectos e incalifícables".