Europa salva la crisis surgida por el reparto de los fondos estructurales
Después de una larga noche de negociaciones comunitarias, la intervención del presidente de la Comisión logiró el acuerdo entre los Doce. Jacques Delors al fin había conseguido el milagro de los panes y los peces, consistente en repartir a gusto de todos un enorme paquete de ayudas por valor de 141.000 millones de ecus (unos 21,2 billones de pesetas). Un paquete tan importante como el Plan Marshall. España será el país más beneficiado y obtendrá entre 6,2 y 6,5 billones de pesetas.
El enorme pastel de los fondos estructurales de la CE, repartido ayer de madrugada, constituye el programa de ayudas a las regiones menos desarrolladas, zonas en reconversión y lucha contra el paro más importante de la historia comunitaria. Sus líneas generales fueron aprobadas en el Consejo Europeo de Edimburgo de diciembre pasado, con el objetivo de duplicar el esfuerzo de redistribución y solidaridad intracomunitaria realizado desde 1988 hasta 1993. El programa responde a una aspiración genuinamente europeísta, que quiere convertir el presupuesto de la CE en un instrumento de reequilibrio y no meramente en un sistema de subvención a una agricultura excedentaria y de lujo como es la europea.Dentro de la cantidad que se disputaban los países comunitarios, los cuatro de la cohesión (España, Portugal, Grecia e Irlanda) habían obtenido en Edimburgo un blindaje de 75.000 millones de ecus (unos 13 billones de pesetas).
La batalla por los fondos ha enfrentado a los pobres entre sí, en un espectáculo un tanto decepcionante para los europeístas más militantes, como es el caso de Delors, que entró en la sala del Consejo, a las diez de la noche del lunes, profiriendo maldiciones contra el "espíritu antieuropeísta" y la pérdida del "espíritu de farnilia" entre los Doce.
La pelea no era para menos, dados los tiempos de recesión económica y la envergadura del botín. El Gobierno español tiene previsto emplear los más de seis billones de pesetas que le han correspondido en reforzar las infraestructras, impulsando el Plan Director de Infraestructuras y el Plan Hidrológico.
Página 33
Editorial en la página 8
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.