_
_
_
_
_

González se desmarca de los renovadores que proclaman la muerte del guerrismo

El presidente del Gobierno, Felipe González, aprovechó ayer su presencia en Salvador (Brasil) para marcar distancias con respecto a la ofensiva desatada por el sector renovador del partido contra el guerrismo. El líder socialista no ha dudado en amonestar a quienes han empañado la formación de su nuevo Gabinete reabriendo, con la máxima crudeza, el enfrentamiento interno. "Algunos opinan sin pensar" dijo aludiendo a los renovadores que han pedido que se adelante el congreso del partido y a quienes han proclamado la muerte del guerrismo, poniendo en evidencia el hondo calado del conflicto de los socialistas españoles.

Tras la clausura en Salvador, capital del Estado de Bahía, de la III Cumbre Iberoamericana, González afirmó que el congreso del partido se va a preparar con calma: "Seis meses a partir de agosto". Según González, los resultados del cónclave socialista ofrecerán una dirección que combine a gentes con experiencia con otras capaces de comunicar los nuevos retos sociales. El líder socialista asegura que la socialdemocracia europea está pendiente de los cambios que protagonicen sus correligionarios españoles, los únicos que resisten la caída de los partidos de esa concepción ideológica, por lo que pide a sus compañeros que huyan de la "tribalización".Los socialistas catalanes aprovecharon ayer unas jornadas celebradas en Barcelona para insistir en este mensaje y criticar las descalificaciones de los renovadores madrileños.

Páginas 13 a 15

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_