La inflación sigue al alza pese a la crisis y se sitúa en el 4,9% en junio

El índice de precios al consumo (IPC) sub¡ó un 0,2% en junio, con lo que la inflación acumulada en el primer semestre del año se sitúa en el 2,3% y la interanual en el 4,9%, según los datos del Instituto Nacional del Estadística (INE). Este repunte, "muy negativo" a juicio de varios expertos, refleja la resistencia de la inflación a bajar a pesar de la recesión que padece la economía española desde finales de 1992. Los sindicatos y los empresarios coincidieron en valorar negativamente el dato y solicitaron un cambio en la política económica.El Ministerio de Economía y Hacienda, en un tono menos pesimista, calificó ayer de "moderado y provisional" el repunte de junio. Este departamento confía en que la inflación recupere su tendencia descendente y se pueda finalizar el año en torno al 4,5% previsto. Economía cree que el impacto de la devaluación de la peseta ha sido absorbido en su mayor parte y espera que a partir de agosto, al desaparecer los efectos en el IPC de la subida del IVA efectuada el año pasado, los precios comiencen a ceder.

La subida del 0,2% en el IPC de junio contrasta con el 0% en el mismo mes de 1992, cuando la economía sí crecía, y coincide con el aumento en más de 35.000 parados que se ha producido en el mismo mes, lo que refleja que aunque se pierden empleos y, por tanto, se limita el crecimiento del consumo privado, los precios siguen al alza.

La inflación subyacente (sin alimentos ni productos energéticos) ha subido un 0,4% en junio y alcanza el 5,9% en tasa interanual. El principal responsable de este aumento es el sector de servicios. Medicina subió un 0,3% y turismo y otros bienes y servicios aumentaron un 0,5%. Unas tasas "excesivamente elevadas para la situación de crisis", opina el servicio de estudios del BBV. El impacto de las devaluaciones en los precios de los productos energéticos -en su mayoría de importación- ha supuesto una subida del 1,2% en el transporte, absorbiendo el buen comportamiento de otros componentes del IPC, como los alimentos, que retrocedieron un 0,4%.

Una vez conocido el dato, el director de economía de la CEOE, José Folgado, consideró muy negativa la subida del IPC de junio. Para Folgado, la situación de estancamiento, de recesión y de caída de empleo, con desequilibrios, tanto en los precios como en el sector exterior, impide aplicar "medidas de recuperación de la actividad y del empleo sobre bases firmes". El sindicato CC OO apunta en la misma dirección. La central cree que es "preocupante" el aumento de precios. UGT, por su parte, advierte de la resistencia de la inflación a ceder debido a la falta de medidas eficaces.