Cuatro 'cascos azules' noruegos, heridos de mortero en Mogadiscio

Cuatro cascos azules noruegos resultaron heridos anoche, dos de ellos de extrema gravedad, cuando guerrilleros somalíes dispararon dos granadas de mortero contra el cuartel de las Naciones Unidas en Mogadiscio, que ocupa los terrenos de la antigua embajada de Estados Unidos en la capital de Somalia. En el momento del ataque cenaban varios cientos de cascos azules.

Se dá por seguro que detrás de este nuevo incidente se encuentra el señor de la guerra Fará Aidid, contra el que la ONU dictó hace un mes una orden de búsqueda y captura. Este ataque es, posiblemente, el más grave desde el del 17 de junio, cuando 23 cascos azules paquistaníes resultaron muertos en una emboscada en un barrio de la capital.

La presión se ha incrementado en los últimos días. Seis somalíes que trabajaban para un periódico de las Naciones Unidas fueron brutalmente asesinados esta misma semana por guerrilleros de Fará Aidid.

Por otra parte, un paracaidista italiano resultó herido ayer en el puerto de Mogadiscio por la bala de un francotirador. No se descarta que en las próximas horas tropas de la ONU, apoyadas por helicópteros estadounidenses, efectúen una operación de castigo contra las posiciones de Fará Aidid.