Unió sigue a Convergència y votará 'sí' a González

El comité de gobierno de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), acordó ayer votar a favor de la investidura de Felipe González, siguiendo los pasos de su socio electoral, Convergència Democràtica (CDC). El líder del partido democristiano catalán, Josep Antoni Duran Lleida, precisó que su sí no es "un cheque en blanco, sino un voto de confianza" y que, en cualquier caso, "está condicionado, a lo que diga Felipe González" en el debate de investidura, un matiz quizás poco importante, ya que nadie prevé un voto diferente, pero que deja a UDC un margen de maniobra al que CDC ha renunciado.La dirección de Unió no sometió a votación la propuesta, sino que la aprobó "por asentimiento", la misma fórmula que hace una semana empleó el Consejo Nacional de CDC para ratificar el no a la entrada en el Gobierno de coalición con los socialistas.

De esta forma no ha sido posible comprobar cuántos miembros de las direcciones de ambos partidos era contrarios a las fórmulas que se sometían a su consideración. La posición de UDC fue clara: "En estos momentos, no hay otra alternativa de gobierno posible".

Duran Lleida reconoció ayer que diversos miembros de la dirección del partido se habían mostrado más proclives a la abstención, en espera, en todo caso, del contenido del discurso de González. Unió cuenta con 5 de los 17 diputados en el Congreso y con 4 senadores de los 14 que tiene la coalición nacionalista.

Para el dirigente democristiano, que mantiene tesis muy próximas a las del líder de la coalición, Jordi Pujol, y mucho más alejadas de las del portavoz parlamentario, Miquel Roca, la decisión adoptada es una muestra de que Unió no desea poner "palos en las ruedas, sino facilitar la tarea del nuevo Gobierno". Duran invitó a los socialistas a "profundizar en los acuerdos económicos" y a dialogar sobre las diferencias en el desarrollo autonómico.

Para los democristianos, han sido las presiones que la coalición de CiU ha sufrido en las últimas semanas para que entrara en el Gobierno las que han obligado a que la decisión sobre la investidura se haya hecho pública de una forma "no ortodoxa". "Lo lógico hubiera sido escuchar el discurso de investidura del candidato, ver qué planteamientos nuestros asumía y, a partir de aquí, expresar nuestra opinión; todo el proceso se ha invertido", indicó Duran.

La autonomía de UDC

Tanto Pujol como Roca habían anunciado la pasada semana el voto favorable de la coalición a la investidura de González sin que los órganos de Unió lo hubieran ratificado. Este hecho fue comentado ayer por la dirección de Unió, y Duran recordó que cada partido debe tomar libremente las decisiones que van más allá de lo que especifica el pacto de coalición.

La dirección de Unió enjuició de forma positiva los resultados de la primera reunión de la comisión mixta PSOE-CiU, aún reconociendo que su opinión favorable se refería básicamente a los planteamientos económicos, con los que, según dijo, "se ha abierto el diálogo". La posición fue más críptica al plantear las posibilidades de acuerdos en materia autonómica, sobre la que aún no se ha empezado el debate programático.

Anoche estaba convocado el comité ejecutivo de CDC, que debía dar el visto bueno a la posición adoptada el pasado viernes por el secretariado permanente. De hecho, la reunión se consideraba ayer de trámite. Incluso Jordi Pujol, que se desplazó ayer por la mañana a Milán y por la noche a Madrid, donde pronunció a última hora de la tarde una conferencia en la Universidad de El Escorial, no pensaba acudir.

En las últimas horas, Roca ha hablado por teléfono con todos los miembros del comité ejecutivo de CDC para explicarles que la precipitación fue debida al deseo de anunciar la posición del partido tras la audiencia del rey Juan Carlos y poner así punto final a "una innecesaria polémica".