19 heridos al colisionar una unidad de cercanías con un tren regional

Cuatro hospitales madrileños recibieron ayer a los 19 viajeros que sufrieron heridas leves en la colisión entre una unidad de cercanías de la línea de Parla y un tren regional con destino a Plasencia (Cáceres), según informaron fuentes de Renfe. Otros 52 pasajeros fueron atendidos de contusiones en el botiquín de la estación de Atocha, de donde habían salido ambos convoyes poco antes del siniestro, ocurrido a las 14.50. Renfe ha abierto una investigación para averiguar las causas del siniestro.

El accidente ferroviario se produjo en las inmediaciones de la estación de contenedores de Abroñigal (M-30), cuando una unidad de la línea C-4 (Atocha-Parla) chocó con la parte posterior del tren regional Madrid-Plasencia. El impacto originó el descarrilamiento parcial del tren regional y causó importantes daños en las cabinas de conducción. Sin embargo, el tren de cercanías pudo regresar a la estación de Atocha, situada a unos dos kilómetros, de donde habían partido ambos convoyes.Los 19 viajeros heridos fueron trasladados en ambulancias desde la terminal de cercanías de Atocha hacia los hospitales Clínico, de la Princesa, Gregorio Marañón y Doce de Octubre. Renfe precisó que el pronóstico de los evacuados era "reservado", aunque sólo presentaban lesiones leves cuando fueron ingresados en los centros sanitarios.

La compañía ferroviaria aún no ha concluido la investigación, pero los primeros indicios apuntan a que el tren regional se detuvo, probablemente a causa de una avería. La mayor parte de los pasajeros reanudó su viaje a Plasencia en el Talgo Madrid-Badajoz, y el convoy que desacarriló pudo ser remolcado tres horas después del accidente hasta los talleres de Renfe. El servicio de trenes de la zona sur no se vio interrumpido, ya que la línea cuenta con cuatro vías.