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Una patrullera yugoslava dispara contra un pesquero italiano

El secretario general del Ministerio de Asuntos Exteriores italiano convocó ayer al encargado de Negocios de Yugoslavia en Roma para protestar por el ametrallamiento de un pesquero, presumiblemente, "en el límite de las aguas internacionales", según la versión italiana, por una patrullera serbio-montenegrina. En el incidente, registrado en la madrugada de ayer, resultó muerto un marinero y herido otro.Por su parte, el ministro italiano de Defensa, Fabio Fabbri, indicó a las unidades navales italianas en el Adriático que intensifiquen su vigilancia, así como sus eventuales respuestas ante nuevos episodios de este tipo. La instrucción está lejos de significar la declaración formal del estado de alerta para la flota, de la que dio inexacta noticia una agencia internacional de prensa, y añade poco al minucioso patrullaje que los buques italianos realizan ya en esas aguas conflictivas.

Tales fueron las reacciones ante un incidente menor, comparado con la muerte de cuatro soldados italianos, el año pasado, al ser derribado un helicóptero de la ONU por fuerzas serbias, o con el asesinato en Bosnia, hace sólo seis días, de tres voluntarios italianos.

Un tripulante muerto

El Antonio e Sipontina, pequepño pesquero italiano víctima de este incidente, pertenece al puerto de Manfredonia, provincia de Foggia, y se encontraba a unas 90 millas al este de Vieste, cuando fue ametrallado. Llevaba cinco tripulantes, de los que tres se encontraban anoche presos en el puerto de Bar, en Montenegro, donde fueron conducidos junto con su barco por la patrullera que les había atacado, sobre las seis y media de la mañana.

Un helicóptero italiano, procedente del crucero Vittorio Veneto rescató a los dos heridos. Uno de ellos, Antonio Gigante, de 56 años, que presentaba un profundo impacto de bala en la ingle, murió en el traslado. El otro, Crescenzo Minervino, de 20 años, que salía a la mar por primera vez tras una larga convalecencia de un grave accidente de carretera, declaró a los periodistas que el Antonio e Sipontina se encontraba parado cuando fue abordado por la patrullera montenegrina, y que ésta les disparó una ráfaga de metralleta sin preaviso ni mediar palabra.

El comandante de la patrullera yugoslava Fruska-Gora reconoció ayer a su homólogo de la fragata española Andalucía que había disparado contra el pesquero italiano hiriendo gravemente a uno de sus tripulantes y levemente a otro, según indicaron ayer fuentes del Ministerio español de Defensa, informa Miguel González.

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