El dinero del desierto

"Hola Felipe", "Qué hay Timoteo", "Buenas tardes", "¿Qué tal?" "Bien hombre". De esa manera se inicia una conversación telefónica mantenida entre José Felipe Bertrán de Caralt -que declara que sólo conoce a Timoteo Ramírez de vista- y este último entre el 13 de febrero y el 13 de marzo de este año. Durante ese mes, la policía registró todas las conversaciones que se mantenían desde dos líneas telefónicas de las oficinas de Bertrán de Caralt, en el Paseo de Gràcia de Barcelona. En la charla, Ramírez y Bertrán de Caralt hablan de cuestiones financieras y de cantidades de dinero. "Oye los números, los dineros los tengo yo aquí", dicen en un momento de la conversación. También en ella se refieren a una ampliación de otra operación a la que llaman "el desierto".Esa conversación forma parte de las 24 cintas que recogen otras entre varias personas, algunas de las cuales están implicadas en la causa judicial y una, en concreto, se mantiene entre Timoteo Ramírez y el letrado Javier Arraut, abogado de Bertrán de Caralt en la causa. Muchas de ellas se parecen: hablan de dinero, de otras personas y de empresas, pero sin concretar demasiado.