Barbero convoca a los peritos de Filesa tres días antes de las elecciones

JOSÉ YOLDI, El juez Marino Barbero ha convocado para el 3 de junio -tres días antes de las elecciones- a los inspectores de Hacienda que realizaron el peritaje del caso Filesa para que ratifiquen el informe que emitieron el pasado 20 de marzo. De llevarse a cabo esta prueba, el fiscal, las defensas de los implicados y las acusaciones tendrían derecho a reclamar datos y aclaraciones al contenido del informe.

La medida dictada por Barbero ha causado sorpresa en medios judiciales, toda vez que la Sala Segunda del Tribunal Supremo había ordenado a Barbero que se abstuviera de seguir con la instrucción de la causa, salvo para aquellas diligencias que estime urgentes e inaplazables", medidas que suelen limitarse a acordar la libertad de algún preso o decretar ingresos en prisión.Los abogados Horacio Oliva y Javier Sáenz de Pipaón, defensores del ex diputado socialista Carlos Navarro, y Pablo Jiménez de Parga, letrado de Luis Oliveré, -administrador de Filesa-, anunciaron anoche su intención de recurrir la providencia dictada por Barbero. El fiscal, según fuentes jurídicas, también tenía intención de recurrir.

Oliva y Sáenz de Pipaón señalaron que su recurso será "muy duro", mientras que Pablo Jiménez de Parga dijo que la providencia de Barbero "no es un acto jurídico, sino un acto político" ya que va a interferir en el proceso electoral. "Al convocarse para tres días antes de los comicios, se convierte en un acto de cierre de campaña" agregó. Jiménez de Parga, que se preguntó por lo inaplazable de un acto que ya fue demorado por el propio Barbero, argumenta que el juez no explica por qué ahora es urgente, máxime cuando lo convoca para dentro de tres semanas, por lo que tampoco parece apremiante.

La providencia de Barbero señala que "medida única, urgente e inaplazable, dada la situación actual del proceso, es la práctica de la ratificación del informe pericial presentado el 20 / 3 y posterior aclaración de las partes".

El magistrado se justifica al señalar que es una diligencia acordada para el pasado 15 de abril y suspendida por la disolución de las Cortes. Añade que fue solicitada por la defensa de Sala y que se invocaba indefensión, lo que le confiere el carácter de inaplazable. Por último, al destacar que no se ha adoptado ninguna medida cautelar ni resolución inculpatoria contra el ex senador, el juez Barbero entiende que el tribunal pretende que lleve a efecto la citada diligencia.

Barbero pasa la patata caliente a la Sala dejando tres semanas de margen para que ésta tenga que mojarse sobre la paralización o celebración de la prueba -un auténtico debate sobre el caso Filesa-, y eso a pesar de que la Sala Segunda, reunida en sala general el pasado 23 de abril, se había pronunciado por no interferir en el proceso electoral. El tribunal va a tener que resolver los recursos y arriesgarse a ser tachado de parcial tanto si paraliza la diligencia como si la permite.

Barbero pospone, por el contrario, emitir informe sobre su propia competencia en el caso.