Un joven inventa el timo de los 'billetes caducados'

El hombre joven llamaba a la puerta y la ancianita acudía a abrir. "Perdone, señora", les decía, "trabajo en tal banco y es que mañana los billetes en curso pierden su valor porque salen otros nuevos. Déme los que tenga aquí y yo le traigo la misma cantidad". La anciana, obediente, le daba sus billetes y el joven nunca volvía. Por lo menos ocho ancianas del barrio de Tetuán picaron y dos han reconocido a Francisco V. F., de 25 años, como el honesto empleado de banca que les estafó 165.000 pesetas.

Francisco fue detenido en su casa del barrio de Moratalaz, y también fue arrestada Ángeles S. T., de su misma edad, que le acompañaba, aunque no entraba en las casas. El joven fue detenido en febrero tras haber arrebatado a otra anciana a la que estaba timando 325.000 pesetas. Francisco fue perseguido y detenido entonces, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía.

Los datos del apuñalado

Por otro lado, ayer fue identificado el hombre que murió el miércoles cosido a puñaladas en la Casa de Campo. Mariano Gómez Higuera, de 35 años, no tenía antecedentes policiales y, según la policía, había ido a pasear al parque en su propio coche, un Renault 5. El grupo de homicidios de la Brigada de Policía Judicial cree, hasta el momento, que el móvil es el robo.La noche del miércoles y la madrugada del jueves fue pródiga en sucesos cuyos protagonistas no cumplían los 20 años. Un chaval de 12 años acercó una colilla a un bote de pegamento. El bote explotó y al chaval le envolvieron las llamas. Le salvó un policía libre de servicio que paseaba cerca de un descampado del barrio del Naranjo, en Fuenlabrada. El policía llevó al niño al hospital, donde fue atendido de quemaduras graves en un brazo.

En Madrid, un niño de 12 años deambulaba por la cuesta de San Vicente, cerca de la plaza de España, a las cinco de la madrugada de ayer. A unos policías municipales les llamó la atención y le pararon. El chaval había huido horas antes de casa ante el temor de la bronca que le iba a caer por varios suspensos en la última evaluación. Los padres habían denunciado la desaparición de su hijo en la comisaría de los Cármenes.

Los bomberos tuvieron que sacar a una adolescente que se encerró en su habitación de su casa de Chamberí y que se tomó un tubo entero de pastillas. Bomberos y policías sacaron a la chica, E. V. A., de 15 años, y la llevaron al hospital Clínico.