Casi 1.000 millones, presupuesto del largo y polémico abono de la Maestranza de Sevilla

Casi 1.009 millones de pesetas -entre 800 y 1.000, según el empresario Diodoro Canorea- es el presupuesto del abono de la temporada de 1993 de la plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla, que consta de 25 festejos y cuyo núcleo central comienza mañana con las corridas de la Feria de Abril. La Unión Taurina de abonados se ha quejado por la repetición de toreros y la ausencia de figuras importantes. Curro Romero y Espartaco son la base del abono.

Diecisiete corridas de toros, dos espectáculos de rejoneo y seis novilladas, que abarcan la feria -15 festejos consecutivos-, los domingos de mayo y junio, la festividad del Corpus y la feria septembrina de San Miguel, a los mismos altos precios del año 92, conforman un largo y polémico ciclo que satisface al empresario y disgusta profundamente a la Unión Taurina de Abonados de la plaza de Sevilla.Su presidente, Juan Maroto, se queja de que "el abono es largo y los carteles están mal rematados". Y añade: "Se repiten toreros que en Sevilla nunca han dicho nada, y se notan las ausencias de figuras importantes".

Luis Manuel Halcón de la Lastra, teniente de hermano mayor de la Real Maestranza, opina que los carteles son de alto nivel, "sobre todo si los comparamos con los de San Isidro", y sólo echa en falta a Ortega Cano, "que es un gran torero que este año tiene además un morbo especial". El empresario, sin embargo, afirma que le interesa. la polémica, aunque no la busca, y añade que le duelen algunas ausencias, "aunque no tengo sitio para todos".

Un año más, Curro Romero y Espartaco, con tres corridas cada uno en la feria, son la base del abono. Junto a ellos, Jesulín de Ubrique, Emilio Muñoz, Enrique Ponce y Finito de Córdoba suman también tres actuaciones, pero una de ellas es en la feria, de San Miguel. Con dos actuaciones figuran El Cordobés, Martín Pareja Obregón, Manzanares, Víctor Mendes, Litri, Joselito, Chamaco, César Rincón, Juan Mora y Pepe Luis Vázquez.

El doctorado de Pauloba

A una sola tarde acuden Luis de Pauloba (que recibirá el doctorado mañana, en la corrida inaugural), Manolo Cortés, Curro Durán, Espartaco Chico, Manuel Sánchez, José Antonio y Tomás Campuzano, Manili, Luis Francisco Esplá, Macandro, Pedro Castillo, Antonio Manuel Punta y Curro Vázquez. Entre las ausencias Ortega Cano, Fernando Cepeda, Niño de la Capea y Julio Aparicio.En total, 29 toreros, cuya presencia no ha sido capaz de mantener la expectación del pasado año. De hecho, la venta de abonos se ha reducido en un 20%, aunque el empresario afirma que se han quedado en taquilla los abonos de sol y de grada de sombra que se compraron de más en el 92. "El tendido de sombra", añade el empresario, "el más caro, está muy consolidado". Además, Diodoro Canorea ha mantenido los precios del año pasado (7.300 pesetas tendido de sombra y 3.700 el de sol), a pesar de que el IVA subió del 13% al 15%, lo cual le parece "divinamente" a Halcón de la Lastra y desata las iras de la Unión de Abonados. "Éstos son los precios más caros de España", dice Juan Maroto, "y no entendemos que todo cueste igual; no más de tres carteles merecen estos precios, y el resto es un auténtico abuso". El presidente de la Unión de Abonados hace hincapié además "en la injusticia que supone pagar en marzo las entradas de junio y septiembre, y sin descuento alguno sobre el precio de taquilla".

El último punto polémico es el de los toros. Sólo una novedad -la ganadería de Núñez del Cuvillo- respecto al abono del 92. El empresario afirma que "se repiten ganaderías como se repiten las figuras", y añade que "debo contar con muchos elementos: ganaderos, toreros, público y la categoría de la plaza". "Procuro que venga lo mejor", añade, y además "los toreros no aceptan cualquier ganadería". Con esta opinión está de acuerdo el representante de la propiedad de la plaza, pero disiente el presidente de los abonados: "Que cada año se repitan las ganaderías", dice Juan Maroto, "es otro mito de Sevilla; no entiendo que un torero se niegue a torear una ganadería determinada, y, si es así, que se conozca".

A pesar de la polémica, Diodoro Canorea cree que hay muchos carteles buenos, "y no como en Madrid, donde abundan los malos", y afirma que "la empresa se conformaría con ganar un 10% del presupuesto del abono".

Mientras tanto, la Unión de Abonados protesta por el cese de dos presidentes de la plaza ("los han destituido por no aceptar presiones y por su integridad"), y a la Real Maestranza le gustaría que el empresario se esforzara comercialmente en vender mejor su producto.