Exiliados marroquíes forman en Málaga un movimiento político de oposición a Hassan
Casi 200 exiliados marroquíes de diferentes tendencias políticas se constituyeron ayer en Fuengirola (Málaga) en el denominado Movimiento de Oposición de Demócratas Marroquíes en el Exilio (MDOM) con el objetivo de trabajar por el establecimiento de un sistema democrático en Marruecos.Los opositores criticaron el apoyo que directa o indirectamente está recibiendo el monarca alauí del mundo occidental, y pidieron que toda ayuda económica, social y política a Hassan II quede condicionada al cumplimiento, por parte del régimen, de los convenios internacionales relacionados con el respeto a los derechos humanos y a los principios democráticos.
En sus conclusiones, redactadas tras un fin de semana de trabajo, este movimiento realiza un llamamiento para boicotear "Ia farsa electoral del próximo mes de junio" y solicita la creación de una comisión internacional bajo control de las Naciones Unidas que visite las cárceles de Marruecos para conocer la situación de los presos políticos.
El Movimiento de Oposición de Demócratas Marroquíes, que eligió como presidente de honor de su ejecutiva al histórico opositor Mumen Diuri, escritor actualmente exiliado en Francia, admitió que se había producido "un rico y denso debate" entre quienes defienden un sistema republicano democrático en Marruecos y los que abogan por una monarquía constitucional. En sus conclusiones, los exiliados admiten: "En este espinoso tema, entendemos que el derecho de decidir el futuro sistema político democrático en Marruecos le corresponde únicamente al pueblo marroquí".
Diuri manifestó al comienzo de este congreso su esperanza en que la CE impida el ingreso de Marruecos mientras el Gobierno mantenga "un sistema tiránico, basado en el crimen y la tortura". Beyuki Abdelhamid, portavoz de la ejecutiva y responsable de las relaciones internacionales, afirmó: "Nosotros queremos que este movimiento sea un estímulo a la falta de alternativas para los ciudadanos de mi país. En estos momentos sólo queda echarse a la muerte en las. pateras o ir a cualquier clase de integrismo ideológico, no sólo al islámico".
Este movimiento opositor ha recibido el apoyo de los sindicatos UGT y CC OO, la Asociación Pro Derechos Humanos y las Juventudes Socialistas, entre otros colectivos.
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