CC OO acusa a Seat de exagerar la crisis para negociar con más fuerza

El secretario general de la sección sindical de CC OO de Seat, Alfonso Rodríguez, acusó ayer a la empresa de exagerar la situación de crisis para mejorar la fiscalidad del sector y para presionar en la negociación del expediente de regulación de empleo de tres años presentado a la autoridad laboral.

En concreto, Rodríguez puso en tela de juicio las declaraciones del vicepresidente responsable de recursos humanos, Ricardo Ibarreche, publicadas ayer por este diario. Ibarreche afirma que Seat reducirá este año en 4.000 o 4.200 trabajadores su plantilla de la Zona Franca de Barcelona para compensar la caída de producción que sufrirá esta instalación desde el 1 de mayo próximo, cuando cese definitivamente la producción del viejo Ibiza. La segunda generación de los Ibiza se está fabricando ya en la nueva planta de Martorell.En declaraciones a Europa Press, Alfonso Rodríguez sostiene que la reducción afectará este año a un máximo de 2.700 trabajadores: 525 prejubilados, unas 200 bajas incentivadas y 1.044 trabajadores afectados por el expediente de regulación.

Sin embargo, la propuesta de regulación planteada por la dirección de Seat afecta a más de 7.000 trabajadores durante tres años, en turnos rotarios de un año a razón de algo más de 2.000 al año. Además, el presidente de Seat, Juan Antonio Díaz Álvarez, ha anunciado la congelación por dos años de todas las inversiones no relacionadas con la renovación o lanzamiento de modelos. Este retraso afectará a 40.000. millones, un tercio de las previstas en 1993 y 1994.

El objetivo de Seat es reducir paulatinamente el número de trabajadores afectados por el expediente retirando del mismo a tantos como bajas se vayan pactando o produciendo, de forma que al final de los tres años de regulación no deba incorporarse ningún trabajador y se haya recortado la plantilla de forma no traumática.

Según Ricardo Ibarreche, estas previsiones están realizadas sobre la base de que el proyecto conjunto de fabricación de un pequeño utilitario conjunto con Suzuki en 1995 se confirme finalmente y que no se agrave la actual depresión que sufre el sector del automóvil en todo el mundo. En caso contrario, el número de bajas en la plantilla de Seat será aún mayor, según el vicepresidente de recursos humanos.

El problema de fondo al que se enfrenta Seat-Volskwagen es el rejuvenecimiento de su plantilla de la Zona Franca, que supera los 50 años de media frente a los 27 años de la plantilla de Martorell. Sin embargo, Seat no acepta nuevos compromisos formales sobre jubilaciones anticipadas por considerar que su alto coste -más de ocho millones por trabajador- no es compatible con la actual política de recorte de gastos e inversiones. Eso no significa, advierte Ibarreche, "que no se vayan a seguir pactando prejubilaciones, pero no de forma global como en los últimos años".