El Club de Empresarios critica la disparidad entre la política económica y la realidad

Varios miembros del Club de Empresarios se quejaron ayer abiertamente de la política económica del Gobierno durante un acto celebrado por esta asociación. El club, que en la actualidad preside Luis Solana (ex presidente de Telefónica y militante del PSOE), está compuesto por empresarios de talante progresista a quienes siempre se ha considerado cercanos al PSOE.Esta circunstancia, en cualquier caso, no fue óbice para que ayer -en el inicio de un nuevo curso de reuniones periódicas- expresaran sus dudas sobre la política económica actual. Los empresarios se preguntaron sobre la conveniencia de permanecer en el Sistema Monetario Europeo (SME) y se quejaron de los altos costes del dinero, la energía, el transporte y de las pocas ayudas para la tecnología. Plantearon el posible cambio de política económica y se sorprendieron de hechos "poco lógicos", como que "el ministro de Agricultura se pegue con los agricultores o el de Industria con los industriales". Solana, que ironizó sobre el peligro de un nuevo motín de Esquilache, resumió: "Somos incapaces de poner de acuerdo racionalidad y realidad".

El Club de Empresarios invitó ayer al catedrático de Economía Emilio Ontiveros, quien se mostró optimista sobre una recuperación mejor en esta crisis que en anteriores y contrario a cambiar el modelo de política económica. "Lo que hay que saber es adaptarse al terreno en que se juega", dijo. A pesar de ello, Ontiveros criticó al Gobierno por sus actuaciones en algunos frentes. En ese sentido, reseñó que "hay que garantizar la estabilidad de los precios y la sanidad de las finanzas públicas" y acusó al Ejecutivo de no haber sabido atender algunas prioridades, como la política industrial y las reformas del sistema financiero, del que dijo que, junto al italiano, el más ineficaz de Europa.

Ontiveros pidió mayor coordinación entre los países y destacó la sensación de interinidad que da el SME, aunque aseveró que España no debe salir de él.

En España, señaló, "las incertidumbres se amplían por la fatal coincidencia del final de un ciclo económico con el de un ciclo político", y dijo que la estabilidad política es crucial para la recuperación. Predijo que "en el mejor de los casos, la economía crecerá este año un 0,5% / 0,6%, y los tipos de interés se situarán en el 10,75% / 11%".