El Consejo de Tráfico pide multas más duras para reducir los accidentes

El Consejo Superior de Tráfico y Seguridad de la Circulación Vial, máximo órgano especializado en materia de tráfico, reconoce que una parte importante de la planificación en seguridad vial desarrollada en los últimos años se incumple por la tolerancia social hacia las infracciones y la falta de implicación de las administraciones públicas. Estas afirmaciones son parte de las 61 propuestas contenidas en el Plan Estratégico de Seguridad Vial elaborado a propuesta de una comisión especial del Senado.

El informe denuncia que, en el terreno de la política, "puede tenerse la impresión de que la seguridad vial sólo preocupa como instrumento de control político", sin que llegue a identificarse con uno de los problemas con mayor coste económico y social. Como objetivo prioritario para una reducción en el número de accidentes del 4,5% anual desde este mismo año y hasta el 2000, emplaza a una cooperación a todos los niveles y entre todos los agentes sociales.Para los autores del informe, "la frecuente comisión de infracciones, tanto en carretera como en ciudad, aunque más en este último ámbito, tiene su raíz no sólo en el incumplimiento práctico de muchas, sanciones, sino también en una especie de tolerancia social al respecto". Éstos y otros factores explican por qué los resultados obtenidos en la reducción de la siniestralidad "no son satisfactorios, o no lo son en la medida en que deberían serlo. Algunas infracciones no deberían nunca quedar impunes".

Los redactores del informe constatan como factores importantes de la alta tasa de siniestralidad una "generalizada falta de respeto a las limitaciones de velocidad, la insuficiente utilización del cinturón de seguridad y de los cascos de protección y la fuerte y negativa incidencia del alcohol".

Accidentes de moto

En el informe se asegura que el número de muertos en accidente de moto crece en mayor proporción que en otros vehículos, hasta haber sobrepasado en los últimos años el porcentaje correspondiente a los peatones.En el ámbito pedagógico se estima que la formación de conductores presenta importantes fallos, pese a los programas de perfeccionamiento de los enseñantes, de las pruebas de aptitud y de los examinadores, y se denuncia "la manifiesta inadecuación, tanto de la Guardia Civil como de muchas policías municipales, a las necesidades del tráfico actual, así como falta de medios materiales, y la insuficiente formación de éstas en muchos casos".

Este análisis -dice el informe- hace que la valoración del estado actual de la vigilancia y control de la circulación no resulte tampoco positiva.

Por otra parte, se subraya que "el auxilio sanitario tras el accidente tiene todavía importantes lagunas" como la perfección de los sistemas de petición de ayuda y evacuación, y una preparación adecuada de los ciudadanos para el tratamiento correcto a las víctimas. Por último, se exige más rigor en la inspección de vehículos.

El plan propone el carné de conducir a puntos, la inmovilización del permiso o el del vehículo durante periodos de tiempo para reincidentes, e intensifica la eliminación de concentración de accidentes en los llamados puntos negros.

Para aquellos conductores reincidentes se establecería un proceso de reciclaje, así como un sistema de persecución de infractores en la CE.