El Nobel Blumberg apuesta por la vacunación infantil contra la hepatitis B

Baruj S. Blumberg, descubridor del virus de la hepatitis B y premio Nobel de Medicina en 1976, recomendó ayer la vacunación infantil sistemática para erradicar el virus de la hepatitis B. Blumberg, que participa en el curso internacional sobre Avances en medicina que se celebra en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, recordó que existen 300 millones de portadores de hepatitis B en el mundo, el 40% de los cuales morirá de carcinoma hepático.El investigador hizo hincapié en la vacunación infantil como única solución contra la hepatitis B, hoy responsable del 43% de todas las hepatitis virales en países desarrollados y la más peligrosa. "En una proporción aplastante se contagia a través de la transmisión sexual", añadió Franklyn Hudson, del Centro de Control de Enfermedades, de Estados Unidos. Hudson estimó que con un programa de inmunización infantil la hepatitis B se erradicará en 20 años. En España existen 750.000 portadores crónicos del virus B y estas hepatitis suponen el 50% de todas las virales. De los 55 millones de muertes que se producen en el mundo anualmente, dos millones se deben a la hepatitis B.

Agente desconocido

Del resto de las hepatitis virales, el 32% se atribuye al virus tipo A y el 21% al C, el menos conocido, el que más cronicidad produce y contra el que todavía no hay vacuna. Las últimas investigaciones han demostrado que la mayor vía de transmisión de la hepatitis C no son las transfusiones sanguíneas, como se pensaba, ya que sólo están detrás del 4% de los contagios. El agente responsable de un 4% de todas las hepatitis virales todavía es desconocido para la ciencia.La gran paradoja de los países desarrollados es que al haber mejorado sus condiciones higiénico-sanitarias han perdido contacto con algunos agentes infecciosos y también su inmunidad frente a ellos. Es el caso de la hepatitis A, responsable de un tercio de todas las hepatitis virales y que cada vez produce más infecciones y muertes entre la población adulta.

El investigador norteamericano Stanley Lemon consideró esta infección como un problema de primera magnitud. De ahí que recomendara vacunas especialmente en personal sanitario, manipuladores de alimentos, viajeros, personas promiscuas sexualmente y aquellas recluidas en instituciones como las cárceles.