Una mujer y su hijo de siete años, hallados muertos en una bañera

Una mujer de 26 años de edad y su hijo, de siete, fueron hallados ayer muertos, sobre las diez de la noche, en la bañera de su domicilio, situado en el número 5 de la calle de Luzmela (distrito de Vallecas).Al cierre de esta edición se desconocía la causa de las muertes, si bien fuentes de la policía municipal barajaban la posibilidad de que se hubiera producido un escape de gas mientras ambos se bañaban.

La madre, que trabajaba en una oficina y estaba separada de su marido, se llamaba Marimar, y el pequeño, Jonathan, según indicaron vecinos del inmueble. El pequeño acudía a clase en el colegio Santo Domingo, "que está al lado de la iglesia de La Colonia", subrayaba anoche, . impresionada por el suceso, una vecina del inmueble.

Los cuerpos sin vida de Mar¡mar y Jonathan fueron hallados desnudos en la bañera, después de que un vecino del bloque "escuchara extraños ruidos en la casa", según comentó anoche un miembro del Cuerpo Nacional de Policía que se encontraba en el domicilio de las víctimas elaborando el atestado.

"Ahora mismo [a las once y media de la noche de ayer] no huele a gas; cuando he llegado estaban abiertas todas las ventanas", puntualizó este agente. Y agregó: "Todavía, hasta que no se practiquen las autopsias, es prematuro aventurar qué ha ocurrido". "Puede tratarse de un escape de gas fortuito o de un suicidio; es difícil saberlo", matizaron, por su lado, fuentes de la policía municipal.

Varias vecinas del inmueble indicaron anoche a este periódico que Marimar "era una buena vecina. Y también el chíquito, muy conocido en el bloque", dijo.

Marimar y su hijo vivían en el tercero derecha del citado inmueble. Según otra vecina, del primero, Marimar y su hijo vivían solos desde que ella y su marido se separaron. "Aunque los padres y familiares de Marimar venían a visitarla con mucha frecuencia", explicó.