Alfonso del Real protagoniza 'Zarabanda'
Una concejal del PP en Madrid precinta la sala que el actor intentaba abrir como café-teatro
Alfonso del Real, de 76 años, vive desde hace dos lo que él califica como una auténtica historia de persecución a cargo de Mercedes de la Merced, concejal presidenta de la Junta de Chamberí en el Ayuntamiento de Madrid y miembro de la ejecutiva del PP. Cuando aún no se han apagado las protestas por el intento de cierre del teatro Alfil a cargo del concejal Ángel Matanzo, surge ahora el caso Zarabanda.La edil, de 31 años, ha decidido impedir que el actor y sus hijos vuelvan a abrir Zarabanda, un local que compraron hace dos años en uno de los barrios céntricos de la capital, y donde Alfonso del Real ha invertido gran parte de los ahorros de toda su vida. Antes de poner en marcha el proyecto, Del Real consultó a la Junta de Chamberí si allí podrían ejercer la actividad de café-teatro. Entonces, la contestación fue afirmativa.
Pero la realidad es que después de múltiples inspecciones, todas favorables, Mercedes de la Merced ordenó precintar Zarabanda a pesar de no tener mandamiento judicial para ello. No pudo conseguir tal orden porque la propia asesoría jurídica municipal le pidió que revisara la legalidad de la clausura.
Sin embargo, la edil decidió precintar. Se basa en una ordenanza según la cual los locales de las "zonas ambientalmente protegidas" precisan unas condiciones especiales. Y Mercedes de la Merced ha decidido permitir la apertura de Zarabanda sólo si el local cierra diariamente a las diez de la noche. Mal horario para un café-teatro en el que ya se habían invertido "más de 200 millones", con el visto bueno oficial.
La edil quiere ahora que en su distrito todos los nuevos locales públicos -o los que cambien de actividad- sólo disfruten de horario diurno (entre las 8.00 y las 22.00 horas). Uno de los locales afectados es un restaurante chino que ya había empezado a funcionar. El actor y sus hijos emprendieron ayer un encierro indefinido hasta que se les haga justicia. En la mañana de ayer les acompañaban representantes de la Unión de Actores, de la Asociación de empresarios de Salas de Fiestas, Discotecas y Variedades de la Comunidad de Madrid y Rafael Merino, vocal del PSOE de la Junta de Chamberí, quien manifestó que Mercedes de la Merced ha hecho una interpretación personal y arbitraria de la normativa en este terreno. También acudió la dirección del teatro Alfil.
El alcalde, José María Álvarez del Manzano, explicó ayer que el local incumple la normativa municipal. Y añadió: "Lo que no se puede hacer es intentar conseguir que se quiebren las normas de la Administración con la presión de un encierro. Vamos a ver si entramos todos en razón".
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