Superdeportivo
Soy un gallego que vive en Barcelona desde el año 1961. Tengo tres hijos nacidos en Cataluña y seguidores del Barça. Yo, en cambio, sigo fiel a mis orígenes y el Deportivo es mi club y naturalmente con la campana que lleva este año es para sentirse orgulloso. Yo me imagino que Arsenio, Fran, Bebeto, Claudio, etcétera, no saben lo que significa para todos los gallegos que hemos tenido que emigrar de la querida Galicia el que los lunes puedas discutir la jornada deportiva, con tolerancia, con respeto, con deportividad y relajados, con los compañeros de trabajo y amigos, pero eso sí, al mismo nivel, con un culé, con un merengue, con un perico, etcétera. Yo comprendo que es un sueño que ya dura demasiado, a mí particularmente ya me han cargado las baterías de mi cuerpo a tope y si ese sueño finaliza en las próximas jornadas ya no hay quien te quite esto. De vez en cuando un cambio de aires, nuevas ilusiones, nuevas esperanzas, son muy necesarias para una buena salud mental y sobre todo para una cura de humildad de los engreídos que están sujetos a la poltrona- .
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