González responde a Aznar que sólo el PSOE garantiza la cohesión territorial de España
El jefe del Gobierno, Felipe González, dijo ayer en Nueva Delhi, en respuesta al presidente del PP, José María Aznar, que la unidad territorial del Estado sólo la garantiza el PSOE. El congreso del PP, calificado por los socialistas de "gran operación de imagen", ha provocado desconcierto en el PSOE, que ahora está a la espera de la cita de Aznar con González en el debate sobre el estado de la nación en marzo. Este congreso ha reforzado en el PSOE, aún más si cabe, la figura de González como garantía de respuesta ante "una oposición crecida".
González explicó ayer en Nueva Delhi que el problema en España es que nunca ha habido más de un partido con representación homogénea y "para gobernar", dijo, "hace falta tener un proyecto político en todos los territorios". La solución a esa carencia, añadió, ni existió históricamente ni se produce ahora. Se trata de "un problema de gobernabilidad, algo tan simple corno eso", agregó. Era una clara respuesta a Aznar, quien el pasado fin de semana dijo que el PP es "un partido cohesionado y, por tanto, con más garantías que los socialistas para trabajar por la vertebración de España".Sobre Aznar, González eludió pronunciarse porque hay "bastantes ocasiones de hacerlo en Madrid". Sin embargo, añadió: "No me parece propio discutir en Nueva Delhi si yo considero al líder del PP como alternativa. Cuando lo consideren los ciudadanos se habrá dado el paso y, en todo caso, considero bueno que haya una alternativa porque la democracia se basa en el juego de alternativas".
González condicionó una hipotética coalición con IU o "el apoyo de cualquier otro grupo" a no tener que "prescindir de la disciplina presupuestarla". La reducción del déficit público tiene que ir incluida en los Presupuestos y su aprobación, admitió, "sin duda traerá dificultades". "¿En qué dirección [iría una hipotética coalición]? Eso me parece prematuro saberlo".
Mayor protagonismo
Las declaraciones sobre política nacional de González en esta gira son un eslabón más del protagonismo que el Comité Federal del PSOE le atribuyó para la precampaña. Precisamente, una de las consecuencias del congreso del PP es el reforzamiento aún mayor entre los socialistas de la imagen de González.Los dirigentes socialistas admiten que el PP ha conseguido, con su undécimo congreso, presentarse ante la opinión pública como "una fuerza consolidada, con coherencia interna y capaz de no generar rechazos" lo que ha sido "una gran éxito de imagen por la expectación inusitada que han conseguido en los medios de comunicación".
También se reconoce desde la cúpula socialista que el PP "ha sabido aprovechar los problemas internos del PSOE y toda la avalancha que se ha levantado por el caso Filesa". Esta nueva situación, en su conjunto, ha provocado inseguridad en una parte de las filas socialistas, acostumbradas durante años a una oposición débil. En la cúpula del Gobierno se ve de otro modo la situación: "Empieza a construirse una oposición de la que carecíamos. Veníamos diciendo desde hace tiempo que era necesaria y ahora que empezamos a tenerla no es para lamentarlo. Nos va a obligar a reflexionar más".
Entre los socialistas hay coincidencia generalizada en la idea de que "la piedra de toque va a estar en la confrontación de los programas, cuya primera manifestación será el debate sobre el estado de la nación donde González y Aznar se verán las caras". También los socialistas ponen en tela de juicio "la solvencia de las propuestas del PP".
Ayer, el jefe del Grupo Parlamentario Socialista, Eduardo Martín Toval, que salió reelegido en su cargo, manifestó que en el congreso del PP "se han prodigado los abrazos y las sonrisas, pero no se han formulado alternativas políticas", informa Anabel Diez. Durante la reunión, los parlamentarios del PSOE decidieron tomar la iniciativa en las propuestas y en los turnos de preguntas y esforzarse en el rigor "para meter en un atolladero al PP, cuyas ofertas son insolventes, de derechas y demagógicas".
La creencia en la solidez de los programas socialistas frente a los del PP aparece unida a la Figura de González, que se presenta para los socialistas como el principal capital del partido. La toma de las riendas del partido por González no ha conllevado aún reparto de papeles alguno.
Menor presencia de Guerra
Desde la dirección del PSOE se interpreta que "González mono polizará la imagen del partido y dirigirá las grandes líneas de la campaña". También creen que "Guerra disminuirá su presencia exterior, pero trabajará desde la cocina" y añaden: "No le vemos a González organizando actos electorales y estudiando la confección de las listas de Jaén".Aunque el eje de la intervención de González en Nueva Delhi sobre política interna versó sobre la flexibilización laboral para generar empleo, anunciada el jueves en El Escorial, el jefe de Gobierno intentó transmitir un mensaje optimista: "Tengo la impresión de que se va a recuperar la economía pronto, aunque lo que es más significativo para un año electoral es que los ciudadanos no lo van a notar".
Situó esa reactivación en torno a febrero de 1994 y para reafirmar su pronóstico no dudó en contestar el informe del Banco de España, que rebaja la perspectiva de crecimiento económico del Gobierno. "Incluso el Banco de España, tan serio, puede errar en sus cálculos", afirmó para explicar que si la autoridad monetaria hubiera lanzado una previsión favorable, sería calificada de "interesada", pero al ser negativa todo el mundo la toma como una verdad que "va a misa". González defendió que no hay alternativa a su propuesta de reforma del mercado laboral.
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