Garzón exculpa al coronel Garabito, pero mantiene como inculpado a Ayuso

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, que investiga las presuntas irregularidades cometidas por la unidad central antidroga de la Guardia Civil, dejó ayer en libertad sin cargos al ex jefe de la misma, el coronel Rafael Garabito. Sin embargo, Garzón mantiene como inculpado a su antecesor, el coronel Arsenio Ayuso, quien "deberá comparecer en el juzgado cada vez que sea llarnado", según informaron fuentes jurídicas.

Rafael Garabito prestó declaración en la mañana de ayer ante el titular del juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón. Éste le interrogó sobre la presunta violación de una saca de Correos por parte de guardias civiles que buscaban una carta de una confidente que había amenazado con "tirar de la manta" sobre las actividades de la Unidad Central de Investigación Fiscal y Antidroga (UCIFA). Garabito aseguró que desconocía este asunto y que en su presencia no se cometió tal delito, en contra de lo declarado por algunos de los agentes implicados en este caso.

Garabito negó que en su unidad se pagara con droga a los confidentes y, tras su declaración, Garzón decretó la puesta en libertad del coronel, que ha quedado exculpado.

Citado un policía -

Posteriormente fue interrogado el coronel Arsenio Ayuso, jefe de la UCIFA hasta su retiro en 1990. Garzón le preguntó acerca de una operación realizada en mayo de ese año, en la que se decomisaron 30 kilos de cocaína, parte de la cual fue supuestamente utilizada para pagar a los confidentes apodados los hermanos Dalton. Ayuso manifestó que durante esta operación se hallaba en Turquía acompañando al secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera.El coronel también fue preguntado por otra actuación en marzo de 1990 en el hotel Barajas de Madrid, donde fueron presuntamente decomisados 9,900 kilos de cocaína, aunque al juzgado solamente llegaron 7 kilos. Se sospecha que los dos kilos desparecidos sirvieron para pagar a un confidente, que en este caso era un sargento de la Guardia Civil apartado del cuerpo.

Ayuso negó que durante su etapa al frente de la UCIFA se pagara con droga a los confidentes, según su abogado, Francisco Escobar. Emilio Rodríguez Menéndez, defensor del guardia arrepentido Vicente Domínguez, explicó que "Ayuso no ha aclarado nada y ha descargado la situación en el teniente coronel Francisco Quintero" (actualmente encarcelado).

El juez ha citado para hoy, jueves, a declarar como testigo al jefe del Grupo de Delincuencia Internacional de la Brigada Judicial de la policía. Con su testimonio pretende aclarar el caso de Ana María Rodríguez Farfay, detenida en 1988 en relación con un alijo de droga y posteriormente puesta en libertad por la Guardia Civil, cuando así se lo pidió la policía.