Semáforo rojo: tabaco y alcohol

"El tabaco es el principal factor de muerte y causante de enfermedades en España", sentencia José María Carro, ex director general de Salud Pública. Las autoridades sanitarias atribuyen al tabaco entre 30.000 y 40.000 muertes anuales, es decir, cerca del 13% del total.Además, el 90% de los ' cánceres de pulmón están estrechamente relacionados con el consumo de tabaco, así como el 30% de los tumores malignos, el 80% de las bronquitis crónicas y enfisemas, y entre el 20% y 25% de las muertes por cardiopatías coronarias y accidentes cerebro-vasculares.

Alrededor del 35% de la población española fuma -entre los jóvenes, alrededor del 50%-, y el inicio en el consumo es cada vez más precoz. La esperanza de vida del fumador se reduce en 10 o 15 años; por tanto, cuando se deja de fumar "se recupera poco a poco la vida perdida", dice Carro.

Cada cigarro es un peligro para la salud, pero en el caso del alcohol, 30 gramos diarios -el equivalente a una cerveza o una copita de vino- no suponen un riesgo, aunque Carro lo considera una media verdad, "porque es difícil mantenerse en esa línea". "En España hay un 10% de alcohólicos -graves, y no hay que olvidar que la cirrosis es la octava causa de muerte en este país", según este médico.

También en este caso cantan los números: 10.000 muertes cada año son atribuibles al alcohol, presente en el 40% de los accidentes de tráfico mortales. Los accidentes laborales, así como la cirrosis hepática, las enfermedades mentales y diversos tipos de cáncer,, son formas en que el abuso de alcohol pasa factura.

'Cosas sencillas'

Tampoco son aconsejables, a juicio de José María Carro, los complejos vitamínicos automedicados: "Las vitaminas que necesita el cuerpo se encuentran en la fruta, las legumbres y la verdura. Hay mucha gente que se sugestiona y cree sentirse mejor cuando toma estos compuestos, que en ocasiones conducen a verdaderas intoxicaciones, por ejemplo, de vitamina C".

El estrés, cuyos compañeros de viaje son a menudo el insomnio, la inapetencia sexual, la dieta desequilibrada y el riesgo de infarto, es otro de los trastornos que acompaña los hábitos de vida insanos.

Los problemas personales y laborales, el ritmo acelerado de trabajo, comidas y sueño irregulares son para Javier Martínez la causa de su estrés: "El remedio es irse de Madrid, de la gran ciudad". Aunque, a juicio de Carro, no son necesarias medidas tan drásticas; basta con tomar las cosas con. más calma: "Vivirnos completamente acelerados y no hacemos suficiente ejercicio. Muy poca gente camina despacio por las) ciudades, todos siguen el ritmo de los que tienen prisa".